El madrileño lidera con el Ferrari el primer entrenamiento por delante de Verstappen (0.130) y Leclerc (0.289). «Checo» quedó sexto y Alonso, décimo, con el Alpine.
Por Jesús Balseiro
Ciudad de México, 29 de julio (AS).- Carlos Sainz está en su mejor momento de la temporada. Lo dictan las sensaciones, lo dicen los resultados: desde Mónaco, ha sido segundo o primero en todas las carreras que ha terminado a excepción de Francia, cuando tenía que remontar desde la 19ª posición de la parrilla por el cambio de motor, y aun así fue quinto. El madrileño sigue en Hungría justo donde lo dejó en Paul Ricard y lidera el primer entrenamiento libre en Hungaroring por delante de Verstappen (0.130) y Leclerc (0.289). Max rebajó a última hora el mejor registro de Charles, pero Carlos sí fue capaz de batir los tiempos de Red Bull cuando montó la goma blanda.
Here's how FP1 finished ?
Carlos Sainz tops the charts in our first session of the weekend ?#HungarianGP #F1 pic.twitter.com/1rTT9as4Y4
— Formula 1 (@F1) July 29, 2022
Aquí el ritmo a una vuelta es fundamental porque el circuito ofrece pocas oportunidades de adelantamiento, y ninguna clara. Por eso, aunque sobre el papel beneficie a Ferrari, Red Bull puede darles un susto este sábado sin son capaces de firmar una pole. De momento, es inverosímil que cualquier otro coche se asome a esa primera fila, porque los dos Mercedes quedaron a más de ocho décimas de la cabeza. Difícil que Hamilton rompa aquí la racha sin victorias, como hizo en 2009 con un McLaren peor que este Mercedes.
Por lo demás, Alpine está donde se les esperaba, dentro del top-10 pero por detrás de McLaren. Alonso, que cumple 41 años este viernes, fue décimo justo por detrás de Ocon. Los dos coches de Woking se asientan en la teórica Q3 y Norris parece por momentos capaz de batir a los Mercedes. Mientras tanto, en el plano técnico, la mayor novedad la firma Haas con un monoplaza inspirado en Ferrari, pero blanco en vez de rojo. Habrá que esperar al domingo para confirmar si la receta de Maranello ha funcionado en casa de Mick Schumacher y Magnussen.
