Irán había informado al Organismo Internacional de Energía Atómica que se preparaba para enriquecer uranio en su instalación subterránea de Fordo, aunque no había revelado hasta qué nivel sería el enriquecimiento.
Por Nasser Karimi
Teherán, Irán, 10 de julio (AP) — Irán anunció el domingo que había empezado a enriquecer uranio hasta el 20 por ciento con centrifugadoras sofisticadas en su planta nuclear subterránea de Fordo, según la televisora estatal, una escalada en medio del estancamiento con Occidente por su maltrecho acuerdo nuclear.
Behrouz Kamalvandi, vocero de la Organización iraní de la Energía Atómica, dijo que el sábado se había retirado por primera vez uranio enriquecido al 20 por ciento en las centrifugadoras avanzadas IR-6. Irán había informado a la agencia de supervisión nuclear de Naciones Unidas hace dos semanas, señaló.
Las centrifugadoras se utilizan para hacer girar el uranio y obtener niveles más altos de pureza. El acuerdo nuclear de 2015 con potencias internacionales pedía que Fordo se convirtiera en una instalación de investigación y desarrollo, y restringiera las centrifugadoras del recinto a usos no nucleares.
Irán había informado al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que se preparaba para enriquecer uranio con una nueva remesa de 166 centrifugadoras avanzadas IR-6 en su instalación subterránea de Fordo. Pero no había revelado hasta qué nivel sería el enriquecimiento.
El OIE, la agencia de supervisión nuclear de Naciones Unidas dijo a The Associated Press que había verificado el sábado que Irán empleaba un sistema que permitiría cambiar con más rapidez y facilidad entre niveles de enriquecimiento.
Irán no hizo comentarios sobre los hallazgos del OIEA.
La noticia de que Teherán ha alcanzado un enriquecimiento del 20 por ciento -a un paso técnico del nivel armamentístico del 90 por ciento- era otro golpe a las ya escasas posibilidades de reavivar el acuerdo nuclear.
Las conversaciones llevan meses estancadas. El enviado especial de Estados Unidos para Irán, Robert Malley, describió la última ronda de negociaciones en Qatar como una “oportunidad desperdiciada”.
