La calificadora advirtió que los altos niveles de inflación podrían causar problemas en el crecimiento económico en México, después de mejorar su expectativa sobre el mercado nacional.
Ciudad de México, 26 de mayo (SinEmbargo).– La calificadora Moody’s elevó su expectativa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de México para el 2022, de 1.1 a 1.8 por ciento, aunque sigue por debajo de las estimaciones de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), quien contempla que será de 3.4 por ciento.
En un comunicado, Moody’s expresó que el cambio en las perspectivas de crecimiento globales se debe a que la actividad económica tuvo un mejor desempeño que lo esperado, principalmente en el sector de servicios, pero también advirtió de los efectos de los altos niveles de inflación.
«Esperamos que la recuperación en el sector de servicios continúe en el trimestre actual. Sin embargo, los desafíos de la inflación están mermando el poder adquisitivo de los hogares, y las interrupciones en la cadena de suministro resultantes de los cierres de China limitarán la fabricación. La débil demanda interna, las débiles perspectivas de inversión y el crecimiento limitado de la productividad limitarán el potencial de crecimiento», detalló.
Al primer trimestre de 2022, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) había reportado una tasa de PIB del 1.0 por ciento.
La calificadora también redujo las proyecciones de crecimiento para este año para las economías del Grupo de los 20 (G20) a 3.1 por ciento en 2022, en comparación del 5.9 por ciento de 2021.
«Esta previsión es medio punto porcentual inferior al crecimiento del 3.6 por ciento estimado en nuestra perspectiva de marzo. Para Estados Unidos, redujimos nuestro pronóstico de crecimiento para 2022 en 0.9 puntos porcentuales a 2.8 por ciento y recortamos nuestro pronóstico para 2023 en 0.2 puntos porcentuales adicionales a 2.3 por ciento. La revisión del pronóstico para 2022 refleja el desempeño de crecimiento mediocre en el primer trimestre y una normalización más rápida del crecimiento en el consumo privado y la inversión empresarial a medida que madura el ciclo económico», dijo.