Un estudio también da cuenta que en algunos países sólo recibieron atención psicológica cerca de un tercio de quienes dijeron necesitarla.
Francia, 17 de enero (RFI).- El personal de salud de once países de América Latina presenta elevadas tasas de síntomas depresivos, pensamiento suicida y malestar psicológico, según los resultados de un estudio liderado por las universidades de Chile y Columbia, con la colaboración de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
El informe The COVID-19 HEalth caRe wOrkErs Study (HEROES) muestra que entre 14.7 por ciento y 22 por ciento del personal de salud entrevistado en 2020 presentó síntomas que permitían sospechar un episodio depresivo, mientras que entre un cinco y 15 por ciento del personal dijo que pensó en suicidarse. El estudio también da cuenta que en algunos países sólo recibieron atención psicológica cerca de un tercio de quienes dijeron necesitarla.
HEROES consistió en entrevistas a 14 mil 502 trabajadores sanitarios de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Bolivia, Guatemala, México, Perú, Puerto Rico, Venezuela y Uruguay, y contó con la participación académicos e investigadores de decenas de instituciones de esos países.
Carmen Martínez Viciana, asesora de salud mental de la OPS explicó a RFI algunas de las razones:
«La preocupación por el contagio entre los propios familiares, al haber estado en mucho más expuestos que otros colectivos. También conflictos familiares con personas ya contagiadas…, cambios en las funciones laborales. Los profesionales sanitarios han tenido que asumir nuevos roles a los que no estaban habituados. Sumado al estigma asociado a los trabajadores de la salud por su propia condición laboral.»
El informe subraya que es urgente el desarrollo de políticas específicas que permitan organizar acciones que protejan la salud mental de estos trabajadores. En ese sentido recomienda modificar el ambiente laboral y garantizar condiciones de trabajo adecuadas. También, otorgar remuneraciones dignas, condiciones contractuales estables y crear espacios donde los equipos puedan conversar, desahogarse y realizar prácticas de autocuidado.
Asimismo, el documento llama a brindar apoyo a los trabajadores de salud para el cuidado de sus hijos y personas mayores a su cargo, dado que en su mayoría son mujeres y cuidadoras. También recomienda poner en práctica los lineamientos para proteger la salud mental del personal en los centros de salud y hacer accesibles los servicios de salud mental para estos trabajadores.