Apenas unas horas antes este lunes, López Obrador había ofrecido su habitual conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional de forma presencial con reporteros. Ahí, indicó que había amanecido ronco y que pensaba era una gripe.
Ciudad de México, 10 de enero (SinEmbargo).– El Presidente Andrés Manuel López Obrador dio positivo a COVID-19 por segunda ocasión desde el inicio de la pandemia, informó el mandatario en sus redes sociales la tarde de este lunes.
«Informo a ustedes que estoy contagiado de COVID-9 y aunque los síntomas son leves, permaneceré en aislamiento y solo realizaré trabajo de oficina y me comunicaré de manera virtual hasta salir adelante», indicó en Twitter el mandatario, quien ya había ofrecido una rueda de prensa presencial esta mañana con reporteros a pesar de tener síntomas que el Presidente calificó de posiblemente una gripe.
Informo a ustedes que estoy contagiado de #COVID19 y aunque los síntomas son leves, permaneceré en aislamiento y solo realizaré trabajo de oficina y me comunicaré de manera virtual hasta salir adelante.
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) January 11, 2022
«En tanto, el Secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, me representará en las conferencias de prensa y en otros actos. ¡Ánimo, con el afecto de siempre!», añadió.
«Toda la fuerza, Presidente López Obrador, nuestros deseos que se recupere pronto», indicó la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.
Toda la fuerza presidente @lopezobrador_ nuestros deseos que se recupere pronto. https://t.co/M1e72x3HIy
— Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) January 11, 2022
A inicios de diciembre, el jefe de Estado mexicano, quien tenía su esquema completo, recibió una dosis de refuerzo de la vacuna AstraZeneca.
El nuevo positivo de López Obrador se da prácticamente un año después de su primer contagio. El 24 de enero de 2021, el Presidente anunció por primera vez que tenía COVID-19.
En aquel momento, los síntomas fueron leves y el lunes 8 de febrero de 2021, dos semanas después de su infección, regresó a sus actividades habituales.
Durante la mañana de este lunes, López Obrador informó que se haría una prueba para detectar la COVID-19, ya que amaneció “ronco”.
“Sí, amanecí ronco. Me voy a hacer la prueba más tarde, pero yo creo que es gripe”, dijo después de que un reportero le hiciera un comentario respecto a cómo se escuchaba su voz.
Esto ocurre unos días después de que Hugo López-Gatell Ramírez, Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, se ausentara de la conferencia de prensa del martes 4 de enero porque presentaba “catarro” y tos.
“Vamos a informar sobre la salud, sobre la pandemia. Nos va a informar el doctor Jorge Alcocer. Hugo no está ahora porque se siente un poco mal y queremos que descanse, que esté bien, lo deseamos porque es un servidor público de primer orden. Nos ha ayudado muchísimo. No es nada grave. Es una gripa. Es ‘catarro’, tos”, aseguró esa ocasión al iniciar su habitual encuentro matutino con los medios de comunicación.
Desde Palacio Nacional, el mandatario señaló que después se sabría con certeza el diagnóstico del funcionario. “Ya después se va a saber qué es lo que tiene, pero para que no haya especulaciones. De todas maneras las va a haber porque sería muy aburrida la vida sin ese tipo de comentarios”, agregó.
Al día siguiente, anunció que López-Gatell había obtenido un resultado negativo en su prueba de COVID-19. “Aprovecho para informar que el doctor Hugo López-Gatell salió negativo de COVID y sólo tiene una gripe, un ‘catarro’ común”, reveló.
Sin embargo, el 7 de enero pasado, la Secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, informó que dio positivo a la COVID-19. Tres días antes, AMLO confesó haberse reunido con ella de forma presencial.
México atraviesa la cuarta ola de contagios, empujados sobre todo de forma explosiva en los últimos días por el avance de la variante Ómicron, que suele contagiarse de forma más rápida.
Apenas el sábado pasado, el país rompió el récord de toda la pandemia al reportar, en apenas 24 horas 30 mil 671 casos nuevos. Sin embargo, a diferencia de las tres olas anteriores, las infecciones no han sido seguidas por un aumento tan fuerte de hospitalizaciones y muertes por ahora.