Mujeres desde los 12 años habitaron en albergues para madres solteras; sin embargo, muchas de ellas fueron obligadas a dar sus bebés en adopción.
LONDRES, 7 de octubre (AP).- La policía de Irlanda del Norte anunció el miércoles una investigación sobre las denuncias de abuso físico y sexual en instituciones administradas por la Iglesia que albergaban a mujeres solteras y a sus hijos.
El anuncio se produjo un día después de que un panel independiente recomendara una investigación pública para examinar los abusos a los derechos humanos en los hogares, así como en las llamadas lavanderías de Magdalena y casas de trabajo.
El Superintendente de detectives Anthony McNally dijo que la policía creó canales dedicados para facilitar que las personas se presenten a hacer sus denuncias.
“Oficiales especialmente capacitados dentro de nuestro Equipo Histórico contra el Abuso Infantil investigarán todas las acusaciones de abuso físico y sexual no reciente contra los residentes de estos hogares”, dijo. “Todos los informes que recibamos serán examinados minuciosamente y cualquier delito detectado será investigado enérgicamente”.
CIFRAS SOBRE EL ABUSO
Un estudio de la Queen’s University y de la Ulster University publicado a principios de año encontró que más de 14 mil niñas y mujeres pasaban tiempo en lavanderías administradas por monjas y hogares para madres y bebés que eran administrados por las Iglesias católica y protestante, y que albergaban mujeres y niñas que quedaron embarazadas fuera del matrimonio.
El estudio encontró que las mujeres fueron maltratadas o retenidas contra su voluntad, y que muchas se vieron obligadas a dar a sus hijos en adopción. La más joven en un hogar para madres y bebés era una niña de 12 años, mientras que la mayor tenía 44 años.
Las instituciones operaron desde la década de 1920 hasta 1990. El estudio dice que, si bien el estigma y la vergüenza asociados a las madres solteras disminuyeron en la segunda mitad del siglo XX, la costumbre siguió siendo significativa hasta la década de 1980.
Los informes de abuso son similares a los denunciados en Irlanda, donde una investigación encontró que nueve mil niños murieron en 18 hogares para madres y bebés durante el siglo XX.