ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS
Desde su estreno, El juego del calamar se ha mantenido dentro de la lista de “lo más visto” en la plataforma. También en redes sociales se ha vuelto tendencia por semanas.
MADRID, 8 de octubre (Europa Press) – Netflix estrenó el 17 de septiembre El juego del calamar, serie surcoreana de nueve episodios. La serie gira en torno a un grupo de personas con problemas económicos que aceptan una invitación para competir en unos juegos que resultan ser desafíos letales a cambio de un tentador premio. El primer episodio sorprende con un sangriento juego que se cobra numerosas víctimas pero, ¿qué protagonistas sobreviven al final de la temporada?
En el episodio 9 Gi-hun y su amigo de la infancia Cho Sang-Woo son los únicos dos miembros supervivientes de los 456 que comenzaron el juego. Tanto Gi-hun como Sang-Woo están absolutamente agotados y traumatizados cuando tienen que enfrentarse en el juego del calamar, al que jugaban cuando eran pequeños.
Ambos se enfrentan en una batalla final. Sang-woo se ha convertido en un villano, utilizando tácticas extremas para vencer. Por su parte, Gi-hun se muestra más humano y moderado. Aparentemente Gi-hun derrota a Sang-woo, tirándolo al suelo. Todo lo que tiene que hacer es entrar en el círculo dibujado en el suelo para que Sang-woo sea eliminado y muera. Pero tal y como establecen las reglas del juego, si la mayoría de los competidores deciden retirarse, todos los jugadores restantes saldrán con vida. Gi-hun se acoge a esta norma y le tiende la mano a Sang-woo para ayudarle a levantarse, pero Sang-woo saca una daga y se suicida. Es así como Gi-hun se convierte en el único superviviente.
IL-NAM TAMBIÉN SOBREVIVE
Il-Nam, el anciano que tiene un tumor cerebral y aparentemente muere jugando a las canicas, también sobrevive. En realidad él nunca estuvo en riesgo, porque la serie revela que Il-nam es uno de los organizadores del juego. Después de haber jugado y ganado cinco años antes, se convierte en líder.
Il-Nam es responsable de muchas muertes pero, cuando le diagnostican el tumor, decide participar. De esta manera, él se une al juego como si fuera invencible, porque nunca iba a perder.