Sonora ocupa el segundo a nivel nacional en mortalidad por COVID-19, junto a Baja California y Estado de México, con una tasa de 21 muertes por la enfermedad por cada 10 mil habitantes, reveló esta semana el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Hermosillo, Sonora, 31 de julio (EFE).- La tercera ola de COVID-19 ha alcanzado a los pueblos indígenas en el norte de México, en el estado de Sonora, donde hay al menos 12 casos y 5 pacientes graves en una comunidad étnica de Punta Chueca tras la visita de turistas nacionales y extranjeros.
Las infecciones se detectaron tras la llegada de cientos de visitantes a la Nación Comcaác, en el desierto de Sonora, para conmemorar el año nuevo de los seris, uno de los principales grupos originarios del estado, que es fronterizo con Arizona, Estados Unidos.
Pero tras la llegada de los turistas, el Gobierno de Sonora informó que realizó la prueba PCR a más de 70 habitantes del lugar, entre los que se detectaron 12 casos positivos, aunque las autoridades advierten de posibles contagiados asintomáticos.
Entre las víctimas del brote están Joel Barnett Morales, gobernador tradicional de la Nación Comcaác, y Enrique Robles Barnett, presidente del Consejo de Ancianos.
Por su delicado estado de salud, al menos cinco adultos mayores requerían internarse en el Hospital General del Estado para recibir atención especializada, pero solo uno accedió.
«Se habló con cada uno de los pacientes y sus familiares acerca del riesgo de no acudir a un segundo nivel de atención, pero solo un paciente accedió al traslado», declaró José Duarte Cubillas, jefe de la Jurisdicción Sanitaria 1 de Salud Sonora.
El brote se produce en medio de la creciente tercera ola de COVID-19 que azota a México, que acumula más de 2.8 millones de casos y 240 mil muertes confirmadas, la cuarta cifra más alta del mundo.
Sonora ocupa el segundo a nivel nacional en mortalidad por COVID-19, junto a Baja California y Estado de México, con una tasa de 21 muertes por la enfermedad por cada 10 mil habitantes, reveló esta semana el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Ahora, Sonora está en alerta amarilla por una ocupación hospitalaria mayor al 50 por ciento, de acuerdo con la Secretaría de Salud.
El contagio entre los seris revela los retos de gestionar los casos en comunidades indígenas y apartadas.
Cubillas informó que enviaron una brigada con dos médicos, dos enfermeras y dos ambulancias del Centro Regulador de Urgencias Médicas, quienes también hicieron un llamado a seguir las medidas de protección contra el virus, como el uso de cubrebocas y sana distancia.
«Hicimos mucho énfasis en los datos de alarma de severidad del covid-19 y la importancia de recibir atención de segundo nivel al presentar complicaciones, a los casos positivos se les brindó el tratamiento y recomendaciones médicas», aseguró.
Además de la visita a la Nación Comcaác de al menos 400 personas entre nacionales y extranjeros entre finales de junio y principios de julio con motivo del año nuevo indígena, otra problemática sanitaria es la escasez de agua en las últimas semanas.
Una planta para desalinizar el agua del mar se descompuso y de ella se abastecen alrededor de 700 habitantes.