En este pronunciamiento, los legisladores solicitaron al Gobierno de EU que tome las medidas necesarias contra la cibervigilancia israelí NSO Group, creadora del software Pegasus.
Ciudad de México, 27 de julio (SinEmbargo).- Cuatro congresistas estadounidenses del partido demócrata emitieron una declaración conjunta este lunes sobre las revelaciones de Pegasus Project, en la que piden al Presidente Joe Biden incluir a NSO Group en la lista de entidades extranjeras involucradas en espionaje para que pueda ser sancionada.
Los legisladores Tom Malinowski (Nueva Jersey), Katie Porter (California), Anna G. Eshoo (California) y Joaquín Castro (Texas) manifestaron distintos puntos sobre las revelaciones de Pegasus Project sobre la selección de varios objetivos con fines de espionaje alrededor del mundo por parte de clientes de la empresa de cibervigilancia israelí NSO.
«Suficiente es suficiente. Las recientes revelaciones sobre el uso indebido del software de NSO Group refuerzan nuestra convicción de que la industria de la piratería informática debe controlarse. Las empresas privadas no deberían vender herramientas sofisticadas de intrusión cibernética en el mercado abierto y Estados Unidos debería trabajar con sus aliados para regular este comercio», se lee en el escrito.
El texto muestra la preocupación de los funcionarios estadounidenses por la piratería informática y la utilización del software espía Pegasus por parte de gobiernos autoritarios contra activistas, defensores y periodistas de todo el mundo.
Esta petición se hace con base en las recientes revelaciones que dieron a conocer distintos medios de comunicación, entre estos los mexicanos Proceso y Aristegui Noticias, sobre el uso del software Pegasus, desarrollado por NSO y usado para el espionaje ilegal a civiles.
«Las empresas privadas no deberían vender herramientas sofisticadas de intrusión cibernética en el mercado abierto y Estados Unidos debería trabajar con sus aliados para regular este comercio», declararon.
NSO vendió el programa a gobiernos de 50 países y desató un escándalo internacional que involucra a los jefes de Estado y de Gobierno por usar recursos públicos para espiar ilegalmente a sus habitantes.
Los legisladores rechazaron que la NSO ignore que los gobiernos usaban Pegasus para actividades ilegales y criminales de espionaje como la intervención, control y acceso de teléfonos celulares. Según los informes, con el software se espió el teléfono de al menos 180 periodistas, 85 activistas de derechos humanos y 14 jefes de Estado.
“NSO demuestra un arrogante desdén por las preocupaciones que de manera constante han mencionado los especialistas en seguridad cibernética sobre el espionaje a funcionarios públicos, activistas defensores de derechos humanos y periodistas”, agregaron los congresistas.
Aparte de sancionar a las empresas como NSO, los integrantes de la Cámara de EU solicitaron al Presidente trabajar con sus homólogos para no garantizar el cierre de las compañías involucradas en el espionaje.
“Los regímenes autoritarios al comprar el software a compañías privadas no hacen distinción entre terroristas y disidentes pacíficos, si usan estas herramientas sólo en contra de terroristas, cualquier persona racional asume que también lo usan en contra de periodistas y activistas, y esto también incluye a Estados Unidos”, apunta la declaración.
Los demócratas Malinowski, Porter, Castro y Eshoo dijeron que nunca tolerarían que, en contratos con compañías privadas, el Pentágono desarrollara un dron, un misil o tecnología láser ni permitir esas herramientas a las agencias de inteligencia.
Los congresistas señalaron al Gobierno de EU una serie de pasos «urgentes» para evitar que se repita un caso como el de NSO:
- Denunciar públicamente y por medio de reportes al Capitolio, a las compañías privadas que dan mal uso a la tecnología cibernética de intrusión y la venden a gobiernos.
- Considerar a NSO y otras compañías para incluirlas en la lista en el Acta Global Magnitsky para que puedan ser sancionadas por la Oficina para el Control de Bienes Extranjeros (OFAC) dependientes del Departamento del Tesoro.
- Aprobar una legislación o una orden ejecutiva para sancionar a los regímenes o personas y compañías que le vendan estas herramientas a gobiernos autoritarios.
- Garantizar que NSO y otras compañías estén impedidas de recibir fondos de inversores estadunidense.
- Acelerar los trabajos para contar con una iniciativa multilateral para imponer controles y transparencia sobre derechos humanos, instrumentos de supervisión o intrusión cibernética.
- Investigar si el programa Pegasus se utilizó en contra de periodistas, trabajadores humanitarios, diplomáticos y otros, de los Estados Unidos y que el Gobierno dé garantías de protección a la ciudadanía ante la creciente amenaza de la industria mercenaria del espionaje cibernético.