Uno de los buques, del siglo XIV, transportaba cerámicas chinas, mientras que el otro, construido en la India, se hundió en 1796.
Ciudad de México, 20 de junio (RT).- Restos de dos barcos naufragados con una gran cantidad de artefactos han sido hallados en las aguas territoriales de Singapur, que fue durante mucho tiempo un centro comercial clave en las rutas marítimas que conectan el océano Índico y el mar de la China Meridional, comunicó este miércoles el Consejo Nacional del Patrimonio del país.
El primer pecio fue descubierto a unos 100 metros al noroeste de la isla de Pedra Branca, después de que un grupo de buzos encontrara accidentalmente en el 2015 restos de cerámica. El barco transportaba cerámicas chinas, que posiblemente se remontan al siglo XIV, lo que mostró que el país –en aquel momento conocido como «Temasek»– era un importante núcleo mercantil mucho antes de la llegada de los colonizadores británicos en 1819.
Las excavaciones, que continuaron hasta el 2019, llevaron al hallazgo de un segundo barco naufragado, a unos 300 metros al este de la misma isla, donde los trabajos terminaron a mediados de este año. Supuestamente se trata del Shah Munchah, barco mercante construido en la India, que se hundió en 1796 mientras navegaba de regreso a su país desde China.
ARTEFACTOS RECUPERADOS
Algunos de los principales hallazgos del primer naufragio son platos y cuencos de la ciudad de Longquan y una jarra. También se descubrieron fragmentos de cuencos de porcelana azul y blanca con motivos de lotos y peonías de la dinastía Yuan (1206-1368).
Michael Flecker, director de proyectos de arqueología marítima del Instituto Yusof Ishak, subrayó que este barco transportaba más piezas de la porcelana azul y blanca que «cualquier otra embarcación naufragada documentada en el mundo». «Muchas de las piezas son raras, y se cree que una es única», agregó.
Mientras, los artefactos recuperados del segundo naufragio incluyen una serie de cerámicas chinas y piezas de aleación de cobre, vidrio y ágata, como estatuillas de la cabeza de Guanyin, de Buda y de un niño de la buena fortuna y figuritas de un perro y de la mítica criatura marina Makara, entre otras.
Además, descubrieron cuatro anclas y nueve cañones, que solían montarse en los barcos mercantes empleados por la Compañía de las Indias Orientales durante el siglo XVIII y principios del XIX, y se utilizaban sobre todo con fines defensivos y de señalización.
«Si el barco hubiera sobrevivido otros 23 años, es casi seguro que habría hecho escala en el puerto restablecido de Singapur. Su cargamento, increíblemente diverso, ofrece una gran perspectiva sobre el tipo de bienes que habrían intercambiado y comprado los nuevos habitantes de esta incipiente ciudad», señaló Flecker.
Se espera que los objetos sean expuestos en los museos a partir de finales de este año. «Lo significativo es que desvela parte de nuestra historia anterior a 1819. Esa parte es poco conocida hasta ahora. Con cada hallazgo, se enriquece nuestra comprensión. La historia de Singapur está claramente relacionada con nuestro comercio marítimo en el pasado e incluso en la actualidad», señaló a CNA Yeo Kirk Siang, director de Investigación y Evaluación del Patrimonio del Consejo Nacional del Patrimonio.