La revisión de 90 días fue ordenada el 26 de mayo por el Presidente Joe Biden para forzar a las agencias de inteligencia estadounidenses a recolectar más información y examinar la que tienen.
Por Christina Larson y Nomaan Merchant
WASHINGTON, 12 junio (AP).- Alguna vez descartada por la mayoría de los expertos de salud pública y funcionarios del Gobierno de Estados Unidos, la hipótesis de que el coronavirus escapó accidentalmente de un laboratorio chino está siendo examinada ahora por una nueva investigación estadounidense.
Los expertos dicen que la revisión de 90 días ordenada el 26 de mayo por el Presidente Joe Biden forzará a las agencias de inteligencia estadounidenses a recolectar más información y examinar la que tienen ya. Funcionarios del Departamento de Justicia del Gobierno de Donald Trump han presionado por una mayor investigación de los orígenes del virus, al igual que lo han hecho científicos y la Organización Mundial de Salud.
Muchos científicos, entre ellos el doctor Anthony Fauci, siguen creyendo que el virus casi seguramente surgió de forma natural y que pasó de los animales a las personas. Los estudiosos no han identificado públicamente evidencia alguna que parezca hacer más probable la hipótesis sobre el laboratorio.
Los virólogos han dicho que es improbable que haya una respuesta definitiva sobre los orígenes del virus en los próximos 90 días. El trabajo para confirmar plenamente los orígenes y las ramificaciones de virus previos —como el primer SARS y el VIH— han tomado años o décadas.
A continuación, un vistazo a lo que se sabe de la nueva investigación estadounidense del virus.
¿QUÉ EXAMINAN AHORA LAS AGENCIAS DE INTELIGENCIA?
Biden ordenó una revisión de lo que la Casa Blanca dijo fue un descubrimiento inicial que llevaba a “dos situaciones hipotéticas”: una transmisión de animal a humano y un escape accidental de un laboratorio. La Casa Blanca dijo en una declaración que dos agencias en la comunidad de inteligencia de 18 miembros se inclinan a la hipótesis de una transmisión en la naturaleza. Otra agencia cree más en un escape de laboratorio.
Un documento que atrae nueva atención es una ficha técnica publicada por el Departamento de Estado en los últimos días del Gobierno de Trump. El memorándum dice que Estados Unidos cree que tres científicos en un laboratorio en Wuhan recibieron tratamiento por una enfermedad respiratoria en noviembre de 2019. Sin embargo, el reporte no es concluyente: se desconocen el origen y la gravedad de la enfermedad que sufrieron los científicos, y la mayoría de las personas en China regularmente visitan hospitales, no médicos de cabecera, para atención de rutina.
El memo apuntó además a estudios de “ganancia de función” —que en teoría pueden aumentar la letalidad o transmisibilidad de un virus— supuestamente realizados en el laboratorio en Wuhan con respaldo estadounidense. Sin embargo, el director de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, Francis Collins, ha negado rotundamente que Estados Unidos haya respaldado algún estudio de “ganancia de función” en los coronavirus en Wuhan.
David Feith, que fue subsecretario de Estado para asuntos de Asia y el Pacífico bajo Trump, dijo que respaldaba el llamado de Biden a una nueva investigación. “En la declaración del Presidente está implícito que hay más que analizar y más que recabar que lo que ha sido analizado y colectado hasta ahora”, dijo Feith.
El director de Inteligencia Nacional declinó hacer comentarios.
¿ESTÁ CHINA OBSTACULIZANDO LAS INVESTIGACIONES?
La declaración de la Casa Blanca criticó a China por falta de transparencia, repitiendo críticas previas de demócratas y republicanos. “La imposibilidad de colocar a nuestros inspectores in situ en esos meses iniciales siempre obstaculizará cualquier investigación del origen del COVID-19”, dijo la Casa Blanca.
The Associated Press ha reportado sobre la interferencia de China en pesquisas de la Organización Mundial de Salud sobre el virus y el aliento chino a las teorías de la conspiración que circulan en internet. China ha forzado además a varios periodistas a salir del país en años recientes y ha silenciado o encarcelado a informantes de Wuhan y otras partes.
La falta de transparencia en China es un obstáculo familiar y significativo, pero no constituye de por sí un indicio de que se está ocultando algo en particular.
“El problema es que cuando haces ese anuncio (el llamado de Biden a una investigación) en un ambiente altamente politizado, eso hace aún más improbable que China coopere con las gestiones para determinar los orígenes del virus”, dijo Yanzhong Huang, socio para salud global en la organización estadounidense sin fines de lucro Council on Foreign Relations.
¿QUÉ CREEN LOS CIENTÍFICOS SOBRE LOS ORÍGENES DEL VIRUS?
El argumento más convincente para investigar la posibilidad de un escape de laboratorio no es ninguna evidencia nueva, sino el hecho de que no se ha confirmado al 100 por ciento otra vía para la diseminación del virus.
“La mayor posibilidad es aún que el virus provino de una reserva de fauna”, dijo Arinjay Banerjee, un virólogo en la Organización de Vacunas y Enfermedades Infecciosas en Saskatchewan, Canadá. Apuntó al hecho de que las instancias de transmisión de virus de animales a humanos son comunes en la naturaleza y que los científicos conocen ya de dos coronavirus similares que evolucionaron en murciélagos y causaron epidemias cuando los humanos se vieron infectados: SARS1 y MERS.
Sin embargo, el caso no se ha cerrado por completo. “Hay probabilidades y posibilidades”, dijo Banerjee. “Cómo nadie ha identificado un virus que sea 100 por ciento idéntico al SARs-CoV-2 en ningún animal, hay espacio aún para hablar de otras posibilidades”.
¿CUÁNTO TIEMPO TOMA CONFIRMAR EL ORIGEN DE UN VIRUS?
Confirmar con una certidumbre de 100 por ciento el origen de un virus a menudo no es rápido, fácil o incluso posible.
Por ejemplo, los científicos nunca confirmaron el origen de la viruela antes de que la enfermedad fuera erradicada a través de una campaña global de vacunación.
En el caso del SARS —una enfermedad causada por un coronavirus beta, como el coronavirus actual— los científicos identificaron inicialmente el virus en febrero de 2003. Más tarde ese año, los científicos descubrieron el probable huésped intermediario: civetas himalayas vendidas en mercados de animales vivos en Guangdong, China, pero no fue sino hasta 2017 que los científicos rastrearon la fuente original probable del virus a cuevas de murciélagos en la provincia china de Yunan.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE SABER EL ORIGEN?
Desde el punto de vista científico, los investigadores siempre están deseosos de entender mejor cómo evoluciona una enfermedad. Desde la perspectiva de la salud pública, si un virus pasa a ser diseminado mayormente por contactos entre humanos, descubrir sus orígenes no es esencial para las estrategias que buscan contener la enfermedad.
“Las cuestiones de orígenes y las cuestiones de control de enfermedades no son las mismas una vez que la transmisión de humano a humano se ha vuelto común”, dijo Deborah Seligsohn, experta en ambiente y salud pública en la Universidad Villanova.
Los republicanos han presionado a que haya más investigaciones sobre un posible escape de laboratorio como parte de una campaña más amplia que busca culpar a China y vindicar el manejo de la pandemia por parte de Trump. Casi 600 mil personas han muerto en Estados Unidos por la COVID-19, el mayor saldo fatal en el mundo.
¿QUÉ PASA DESPUÉS DE 90 DÍAS?
Muchos científicos advierten que es improbable que una investigación de 90 días arroje respuestas definitivas.
“Raramente descubrimos una ‘pistola humeante’”, dijo Stephen Morse, experto en enfermedades infecciosas en la Universidad de Columbia. “Incluso en las mejores circunstancias, raramente recibimos certidumbre, solamente grados de probabilidad”.
Cualquier conclusión será explosiva políticamente, sobre todo si sale a la luz evidencia nueva que apoye o descarte transferencia zoonótica o un escape de laboratorio. Y de no alcanzar conclusiones definitivas, el resultado más probable tras 90 días pudiera dar argumentos, tanto a partidarios como oponentes de Trump por igual, además de envalentonar a los promotores de las teorías de conspiración.
Mientras tanto, expertos como Huang sospechan que China simplemente pudiera encerrarse más, lo que añadiría otra complicación a las relaciones internacionales ya tensas. “Esto probablemente hará más difícil extraer concesiones de China para que permita que otro equipo visite Wuhan o tenga acceso irrestricto allí”, dijo.