Agentes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) continúan las pesquisas en el domicilio de Andrés «N», de 72 años, presunto feminicida serial que ya fue vinculado a proceso por el asesinato de una mujer.
Ciudad de México, 22 de mayo (EFE/SinEmbargo).- Autoridades del Estado de México revelaron que Andrés “N”, presunto feminicida serial de 72 años detenido en el municipio de Atizapán, Estado de México, se sentaba a comer con la familia de Reyna González, su última víctima.
“La familia de la última víctima está sumamente lastimada. Este señor era cercano a la familia. Iba incluso a comer a su casa. Allegándose de esta buena voluntad por parte de la familia, pues su última víctima se encuentra en este estado de indefensión, derivado de la confianza que se generaba”, dijo Dilcya García, fiscal para Delitos de Género de la Fiscalía del Estado de México, durante una entrevista con Adela Micha.
“Sabremos sobre su modus operandi cuando sepamos quiénes son sus otras víctimas. Aún es temprano para decir alguno. Es temprano para poder referir si hubo indicios de canibalismo en el caso”, agregó.
Agentes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) continuaron el viernes las pesquisas en el domicilio de Andrés «N», de 72 años, presunto feminicida serial que ya fue vinculado a proceso por el asesinato de una mujer.
En el municipio de Atizapán, del Estado de México, la calle donde se ubica la vivienda permaneció acordonada y apenas se pudieron ver varias furgonetas, un camión y una excavadora realizando labores de investigación por parte de la FGJEM.
Durante la tarde, un camión de carga salió de la zona lleno de escombro y según imágenes y videos distribuidos por la Giscalía, dentro del domicilio continúan buscando pruebas y resto óseos, ya que según medios locales, el sujeto dijo haber asesinado a más de 30 mujeres en los últimos 20 años.
Sin embargo, por el momento su vinculación a proceso se debe a quien sería su última víctima, Reyna González, una mujer de 34 años a la que conocía y cuyos restos fueron encontrados en la casa, según indicó la FGJEM en un comunicado.
Además, también compartieron el hallazgo de las identificaciones de dos mujeres desaparecidas en 2016 y 2019.
Los vecinos de la colonia (barrio) Lomas de San Miguel y las colonias colindantes tratan de reanudar la vida normal a pesar de la presencia de las autoridades y la complejidad de la situación, que cogió a todos por sorpresa.
«Me sorprendí cuando empezó este asunto. Al ver la foto de cuando está detenido me sorprendió que es el señor que normalmente era mi proveedor (de cemento y otros materiales) cuando yo estaba construyendo mi casa, todavía hace 15 días que lo vi pasar. Fue una desagradable sorpresa», dijo a Efe Jorge, un vecino de la zona.
Saúl, un joven de 24 años quien vive en la calle siguiente a la del acusado, aseguró que es una zona «tranquila, humilde y familiar», por lo que para todos resultó muy «sorprendente» cuando hace dos días la Policía acudió a San Miguel y, después de un cateo en la casa, se llevó detenido al presunto feminicida.
«Yo la verdad lo conocía nada más de vista pero era conocido por toda la colonia, era un vecino más. Nunca nos dimos cuenta de que tuviera inclinación por realizar esos actos», añadió Saúl.
Durante la mañana del viernes, varias mujeres encapuchadas realizaron pintadas en el Parque Adolfo López Mateos en protesta por las posibles mujeres asesinadas por Andrés «N».
El martes, policías de la FGJEM ingresaron a este sujeto a un penal para ser investigado por el feminicidio de una mujer de 34 años, quien «habría sido asesinada y desmembrada dentro de un inmueble» en el que habitaba el presunto criminal.
«Derivado de las indagatorias hechas hasta el momento, se ha podido establecer que este sujeto podría estar relacionado con el asesinato de otras personas», indicó un boletín de la Fiscalía estatal.
El escándalo estalla mientras México afronta una crisis de violencia machista con más de 10 mujeres asesinadas cada día, según ONU Mujeres.
Marzo rompió el récord como el mes más violento contra las mujeres, desde que existen registros, con 267 mexicanas como presuntas víctimas de homicidio doloso, además de otras 95 supuestas víctimas de feminicidio, como clasifican las fiscalías a los asesinatos por razones de género o violencia machista.