La OMC prevé que el PIB mundial suba un 5.1 por ciento en 2021 y un 3.8 en 2022, mientras que el comercio de mercancías ascendería un 8 por ciento en este año y un 4 por ciento en el siguiente.
México forma parte de la región de Norteamérica, en la que la OMC estimó un crecimiento de 5.9 por ciento en 2021 y 3.8 en 2022.
Ginebra, 31 de marzo (EFE).- El PIB de América del Sur, Central y Caribe crecerá un 3.8 por ciento en 2021 y un 3 por ciento en 2022, anunció hoy la Organización Mundial del Comercio (OMC) en su informe de perspectivas para el bienio.
Las exportaciones en la región aumentarán un 3.2 por ciento este año y un 2.7 en el próximo, mientras que las importaciones crecerán un 8.1 por ciento en 2021 y un 3.7 en 2022, anticipa la OMC.
El organismo condiciona estas cifras y las de otras regiones a que la campaña de inmunización contra la COVID-19 pueda seguir su curso sin que aparezcan variantes resistentes a las vacunas.
Las cifras latinoamericanas en general se situarían por debajo de la media global, ya que la OMC prevé que el PIB mundial suba un 5.1 por ciento en 2021 y un 3.8 en 2022, mientras que el comercio de mercancías ascendería un 8 por ciento en este año y un 4 por ciento en el siguiente.
Las previsiones regionales de América Latina y el Caribe no incluyen a México, dado que ese país se incluye en las cifras para Norteamérica, donde la OMC estima que el PIB crecerá un 5.9 por ciento en 2021 y un 3.8 en 2022, por encima de sus vecinos del sur.
Las exportaciones en las economías norteamericanas subirán, según los cálculos de la OMC, un 7.7 por ciento este año y un 5.1 el que viene, mientras que las importaciones ascenderían un 11.4 por ciento en 2021 y un 4.9 en 2022.
COMERCIO MUNDIAL AL ALZA
El comercio mundial aumentará un 8 por ciento en 2021 pero se desacelera al 4 por ciento en 2022, por lo que los intercambios seguirán ambos años por debajo de los niveles previos a la pandemia, anunció este miércoles la Organización Mundial de Comercio (OMC).
El organismo también anticipa que el PIB mundial crecerá un 5.1 por ciento este año y un 3.8 el próximo, después de haber retrocedido un 3.8 en 2020 por la pandemia de COVID-19.
Los intercambios mundiales «están listos para una recuperación sólida, aunque desigual», resumió la OMC, que calculó una caída del volumen del comercio global en 2020 del 5.3 por ciento, un porcentaje menor al 9.2 que la organización preveía en su anterior informe de perspectivas, en octubre del pasado año.
De acuerdo con la OMC, la pandemia de COVID-19 «sigue planteando la mayor amenaza a las perspectivas para el comercio, ya que nuevas olas de infecciones podrían fácilmente frustrar la esperada recuperación».
La vacunación contra esta enfermedad que ya ha causado la muerte de más de 2.7 millones de personas es el factor que tiene más en cuenta la OMC en sus análisis, hasta el punto de que la velocidad con la que se logren distribuir las dosis podría tener un enorme impacto en la recuperación económica según sus previsiones.
En el escenario más optimista, si se logra acelerar la producción y difusión de vacunas, la OMC considera que podría añadirse un punto porcentual más al crecimiento del PIB de este año (se situaría por encima del 6 por ciento) y de 2.5 puntos en el comercio de mercancías (para subir un 10.5 por ciento).
En este posible escenario el comercio regresaría a sus tendencias anteriores a la pandemia ya en el cuarto trimestre de 2021.
En cambio, en una previsión más pesimista en la que la producción de dosis no satisfaga la demanda y aparezcan nuevas variantes del coronavirus más resistentes a las vacunas, la OMC bajaría sus perspectivas de crecimiento para este año a un 4 por ciento en el caso del PIB mundial y en torno al 6 por ciento a los intercambios comerciales.
«A medio y largo plazo, la deuda y los déficit públicos podrían también pesar en el crecimiento económico y el comercio, en particular en los países en desarrollo sumamente endeudados», añadió el nuevo informe de previsiones de la OMC.