El suministro de vacunas será limitado al principio. No habrá suficientes para proteger a todo el mundo, pero ponérselas a la gente adecuada podría cambiar el curso de la pandemia.
Los Ángeles, 17 de noviembre (AP).- ¿Quiénes serán los primeros en recibir la vacuna contra la COVID-19?
Todavía no se ha tomado una decisión, pero el consenso entre muchos expertos en Estados Unidos y en el resto del mundo es que los trabajadores sanitarios deberían ir primero, dijo Sema Sgaier, de la Fundación Surgo, una ONG que trabaja en temas de reparto de vacunas.
Un comité de expertos que asesora a los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) está considerando además dar prioridad a los trabajadores de industrias esenciales, a gente con determinadas afecciones médicas y a mayores de 65 años.
Una vez que la vacuna tenga la aprobación de la Administración de Medicamentos y Alimentos, el comité analizará los datos de los ensayos clínicos sobre los efectos secundarios y sobre la reacción en gente de distintas edades, etnias y condiciones médicas. Esto determinará sus recomendaciones a los CDC acerca cómo deben priorizarse las vacunas.
Se espera que las autoridades estatales sigan los lineamientos de los CDC en la distribución de las primeras dosis.
El suministro de vacunas será limitado al principio. No habrá suficientes para proteger a todo el mundo, pero ponérselas a la gente adecuada podría cambiar el curso de la pandemia.
Muchas otras dudas sobre su distribución siguen sin respuesta, apuntó Sgaier, como si deben distribuirse de forma igualitaria en todo el país o centrarse en los principales focos de contagio.