Hasta ahora, la vacuna recombinante puede cubrir por completo todas las mutaciones del nuevo coronavirus, dijo Chen, investigadora del instituto.
BEIJING, 9 de septiembre (Xinhua) — China puede lograr actualmente una producción anual de 300 millones de dosis de una vacuna recombinante contra la COVID-19 y aumentará aún más su capacidad, dijo Chen Wei, directora del equipo de investigación de la vacuna.
La vacuna recombinante desarrollada por el Instituto de Medicina Militar de la Academia de Ciencias Militares, una vacuna diseñada genéticamente, utilizó un adenovirus defectuoso modificado como vector.
Los datos actuales muestran una muy baja probabilidad de mutación del gen del virus que el equipo eligió para elaborar la vacuna.
Hasta ahora, la vacuna recombinante puede cubrir por completo todas las mutaciones del nuevo coronavirus, dijo Chen, investigadora del instituto.
Incluso si el gen elegido muta, lo que debilitaría el efecto protector de la vacuna, la vacuna actual todavía puede utilizarse para lograr la inmunidad básica, y China puede desarrollar rápidamente una vacuna dirigida específicamente a la mutación para ampliar el efecto de inmunidad, dijo Chen, también investigadora de la Academia de Ingeniería de China.
«Es como una actualización y un parche de software», dijo Chen.
El 16 de marzo, la vacuna desarrollada por el equipo de Chen comenzó las pruebas clínicas de fase 1, la primera del mundo. De acuerdo con los datos publicados en mayo en la revista médica The Lancet, los 108 participantes vacunados desarrollaron anticuerpos.
Richard Horton, editor en jefe de The Lancet, describió los resultados de la investigación como un importante hito y señaló en su página de Twitter que la vacuna es segura, es bien tolerada e induce una rápida respuesta inmunológica.
«Al dar a conocer nuestros métodos de realización de pruebas e indicadores al mundo, hemos ayudado a investigadores de otros países a evitar rodeos y hemos promovido la investigación mundial en vacunas», dijo Chen.
En julio, los datos de las pruebas clínicas de fase 2 de la vacuna también fueron dados a conocer al mundo. Los resultados de las dos fases de las pruebas clínicas verificaron la eficacia y la seguridad de la vacuna.
Here is a second COVID-19 vaccine trial, led by Chinese scientists. This recombinant adenovirus type-5 vaccine induces a rapid humoral and cellular immune response within 14 days. No serious adverse reactions. Again, congratulations to Feng-Cai Zhu et al. https://t.co/onf8ZnBy2W
— richard horton (@richardhorton1) July 20, 2020
En junio, China aprobó un esquema de prueba para el uso de emergencia de vacunas contra la COVID-19 y la vacuna recombinante recibió luz verde para ser inyectada a personas específicas con alto riesgo de exposición al virus.
En agosto, la vacuna recibió una patente, la primera patente del país para una vacuna contra la COVID-19.
Actualmente, las pruebas clínicas de fase 3 se están llevando a cabo en el extranjero para evaluar aún más la eficacia y seguridad de la vacuna entre un mayor número de participantes, dijo Chen.
Aunque todavía hay datos insuficientes actualmente para confirmar la duración de la eficacia de la vacuna, los datos muestran que la dosis inyectada en marzo todavía es efectiva, dijo Chen, quien añadió que todavía está en curso la investigación relacionada.
Después de que terminen las pruebas clínicas de la fase 3, el equipo ampliará la capacidad de producción para facilitar la vacunación masiva en cualquier momento, dijo.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, más de la mitad de las vacunas contra la COVID-19 que han entrado a las pruebas clínicas de fase 3 fueron desarrolladas por China.
Esto indica que China ha estado desempeñando un papel de vanguardia en la investigación y desarrollo mundial de vacunas contra la COVID-19, dijo.