El edificio ubicado en la calle de Cuba, en el Centro Histórico capitalino, se encuentra tomado por familiares de víctimas y exigen justicia a las autoridades.
Ciudad de México, 3 de septiembre (SinEmbargo).— Silvia Castillo, madre de familia, exigió a las autoridades que se haga justicia por el asesinato de su hijo en San Luis Potosí, desde la sede de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en la Ciudad de México.
El edificio ubicado en la calle de Cuba, en el Centro Histórico capitalino, se encuentra tomado por familiares de víctimas y exigen justicia a las autoridades.
«Pido justicia, no pido dinero, porque un hijo no tiene precio, un hijo no está en venta, yo quiero justicia», gritó desde el balcón.
Un grupo de 15 personas se reunió el día de ayer con Rosario Piedra Ibarra, titular del organismo, quien el día de hoy aclaró que las exigencias competen a la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) y a autoridades locales.
«Autoridades de la CEAV acudieron al lugar para atender y revisar los casos y se acordó una reunión con el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas Rodríguez, para agilizar en lo posible las gestiones», informó.
Marcela Alemán, madre de familia que se atrincheró en las instalaciones de la CNDH para exigir justicia por la violación de hija de cuatro años, ocurrido en 2017, a manos del personal del Instituto Luis Gonzalo Urbina, ubicado en San Luis Potosí, denunció omisiones de las autoridades en entrevista al periódico El Universal.
«Primeramente queremos justicia, que los violadores de mi hija paguen porque fueron hombres y mujeres de un colegio disfrazado, sacaban a mi hija para tener relaciones sexuales, después de su violación tuvo un desgarre en la parte anal y yo ya estoy cansada de pedirles justicia, además de visitar oficinas donde sólo me dan números que no contestan», denunció la madre.
Tanto Marcela Alemán como Silvia Castillo, exigen justicia y han señalado que no quieren pedir dinero de las autoridades.
«Quiero que se actúe conforme a derecho, yo no quiero dinero, quiero justicia, eso es lo que quiero», pidió Marcela Alemán.
