En estos automóviles, las mangueras de los frenos delanteros pueden romperse, lo que provocaría una fuga progresiva del líquido de freno, necesario para un buen funcionamiento de los mismos.
DEARBORN (ESTADOS UNIDOS), 12 Ago. (EUROPA PRESS).- La firma automovilística Ford ha llamado a revisión a más de medio millón de vehículos en Norteamérica debido a un problema en los frenos, que puede hacer que los modelos se queden sin líquido de frenos, lo que aumenta la distancia de frenado y el riesgo de accidente.
Tal como ha anunciado el fabricante, este fallo afecta a ciertos Ford Edge de entre 2015 y 2018 y a algunos Lincoln MKX de entre 2016 y 2018 de Estados Unidos, Canadá y México. Así, se calcula que unos 488 mil 594 vehículos en Estados Unidos, unas 62 mil 876 unidades en Canadá y hasta 7 mil 140 coches en México están afectados.
En estos automóviles, las mangueras de los frenos delanteros pueden romperse, lo que provocaría una fuga progresiva del líquido de freno, necesario para un buen funcionamiento de los mismos.
Asimismo, Ford también ha llamado a revisión a más de tres mil Lincoln Corsair de 2020 de Estados Unidos, Canadá y México por un problema en el sistema de suspensión.
Además, casi 500 unidades del F-150 vendidas en Estados Unidos tendrán que pasar por el taller debido a un problema en la batería de arranque, que podría provocar un incendio.