El pasado 3 de agosto, el Juzgado Quinto de Distrito en Veracruz emitió una sentencia que establece que la Fiscalía de Veracruz violó los derechos de la familia de Ricardo Adrián, víctima de desaparición forzada, pues no se realizó una búsqueda eficiente, profesional y tendiente a saber del paradero del joven.
Ciudad de México, 11 de agosto (SinEmbargo).– “Ricardo, ¿dónde estás?”, es la pregunta que todos los días lanza, desde hace siete años, Velia Aurola García Cruz, madre de Ricardo Adrián García Cruz, desaparecido en Veracruz, Veracruz.
“Yo no pierdo la esperanza de encontrar a mi hijo con vida. No hay un solo día en que no piense y me pregunte dónde y cómo está”, platicó la mujer en entrevista con SinEmbargo.
Ricardo Adrián García Cruz desapareció en la colonia “Formando Hogar”, al igual que otros ocho jóvenes, luego de un operativo realizado por la Secretaría de Marina y la entonces Agencia Veracruzana de Investigación entre el 6 y 11 de diciembre de 2013.
El pasado 3 de agosto, el Juzgado Quinto de Distrito en Veracruz emitió una sentencia que establece que la Fiscalía de Veracruz violó los derechos de la familia de Ricardo Adrián, pues desde su desaparición no se realizó una búsqueda eficiente, profesional y tendiente a saber del paradero del joven.
El fallo del juez le ordena a la Fiscalía veracruzana realizar un plan de investigación enfocado a conocer el paradero o lo que sucedió con el joven y entregar a la familia las copias del expediente y las diligencias que hayan realizado en estos años.
¿QUIÉN ERA RICARDO?
Ricardo tenía 35 años de edad cuando desapareció en aquel 2013. El joven ingeniero mecánico estaba a punto de entrar a trabajar a una plataforma de Pemex y también tenía planes de boda, platicó su madre.
“Él estaba muy emocionado porque ya había entregado la papelería para entrar a trabajar a la plataforma. Trabajaría 40 días y otros 40 días iba a descansar. En el tiempo de descanso planeaba hacer mecánica por su cuenta”, narró la madre en entrevista.
El 13 de diciembre de 2013, Ricardo se encontraba en su centro de trabajo, acompañado por su compañero David Salas Ariel, cuando de arribaron tres camionetas y de ellas descendieron hombres armados y uniformados de policías e integrantes de la Marina.
Los presuntos agentes irrumpieron en el inmueble y con uso de violencia privaron de la libertad a Ricardo y David. Desde entonces no se ha vuelto a saber de ellos.
Velia Aurora no se enteró de la desaparición hasta el día después, cuando su nuera le llamó para preguntarle por el paradero del joven.
“Semanas antes, Ricardo se había ido con un amigo llamado Ángel a realizar un viaje de tráiler; entonces, cuando no llegó a la casa esa noche pensé que quizá se fue de nuevo, pero cuando me llamó su novia supe que algo andaba mal porque ellos siempre tenían comunicación», narró.
La madre comenzó a buscar a su hijo con sus amigos y uno de ellos le dijo que al parecer lo habían detenido junto con uno de sus compañeros, fue entonces que Velia acudió ante las autoridades locales para preguntar por su hijo y obtener información sobre paradero de los jóvenes, pero únicamente recibió respuestas negativas.
«Fui al Penalito de Playa Linda (Unidad Mixta de Atención al Narcomenudeo) y a varias oficinas, pero no estaban ahí. Una persona de la Fiscalía me dijo que a veces tardaban en presentarlos porque primero se los llevaban a dar una vuelta y a golpearlos, fui después y nada», relató la entrevistada.
Al no tener noticias sobre su hijo, la señora acudió ante el agente del Ministerio Público de la Fiscalía Especializada en Atención de Denuncias de Personas Desaparecidas Zona Centro para presentar las denuncias correspondientes.
Las autoridades no han avanzado en las investigaciones, detalló la entrevistada. Tampoco han hecho una indagatoria objetiva e imparcial, tendiente a lograr la localización de Ricardo y David, así como a identificar a los responsables de su ausencia.
«Todos los de la familia tenemos el corazón desecho por su desaparición. Por años no se hicieron festejos ni reuniones familiares, solo queremos saber donde está, qué pasó con él y justicia», agregó.
DESAPARECIERON A VARIOS
Ricardo Adrián no fue la única víctima de desaparición forzada cometida por fuerzas federales en conjunto con autoridades policiacas locales. Los días 6 y 11 de diciembre, elementos de la Agencia Veracruzana de Investigación y la Secretaría de Marina se desplegaron en un pequeño espacio geográfico de la colonia “Formando Hogar”, en la ciudad de Veracruz, Veracruz. Se presume que fueron los escuadrones policiales y de las fuerzas armadas quienes habrían desaparecido a los jóvenes Ricardo Adrían García, Pablo Darío Miguel Hernández, Yonathan Izac Mendoza Berrospe, José Armando Cortés Arrioja, Víctor Álvarez Damián, Marco Antonio Ramírez Hernández, David Salas Ariel, José Ignacio Cruz González y Vicente Helos.
De acuerdo con los familiares de las víctimas, los uniformados llevaban fotografías y descripciones detalladas de los jóvenes detenidos y desaparecidos, mismas que hasta el momento se desconoce su destino.
“La detención colectiva y programada y posterior desaparición de los jóvenes continúa sin ser investigada por las autoridades estatales o federales”, informó la organización civil Idheas que brinda acompañamiento a las familias.
EL CASO A UN JUEZ
La familia de Ricardo ha tenido que litigar contra las autoridades para que las mismas rindan cuentas de las diligencias e investiguen de manera profesional.
En septiembre de 2019, la madre de Ricardo solicitó al Agente del Ministerio Público la expedición de copias de la averiguación previa, así como la elaboración, explicación y expedición de una copia simple del plan de investigación de acuerdo con el Protocolo Homologado de Investigación del Delito de Desaparición Forzada de Personas, pero el 2 de diciembre de ese año le negaron la petición.
Debido a la falta de respuesta de las autoridades, la familia de la víctima junto con la organización civil Idheas promovió un juicio de amparo.
El pasado 3 de agosto de 2020, el juez de distrito resolvió a favor de la familia de Ricardo, pues acreditó la existencia de violaciones graves a los derechos humanos por la omisión de la Fiscalía de Veracruz en implementar una investigación objetiva, eficaz, completa e imparcial tendente a conocer el paradero o la suerte del joven Ricardo Adrián; además de negar a las víctimas el acceso al expediente de la investigación.
En la resolución, el juzgador le ordenó a la Fiscalía de Veracruz que desarrolle un plan de investigación que señale la ruta de trabajo: “El ente investigador deberá ubicar las hipótesis de cómo sucedieron los hechos, es decir, deberá establecer como hipótesis la desaparición forzada. También debe explicar por qué sucedieron los hechos, quiénes estuvieron involucrados, quiénes formarán parte de la investigación”, detalló la organización civil Idheas al informar sobre la resolución del juez.
Otro aspecto que contempla la sentencia es que la Fiscalía también debe entregar un listado de las pruebas que existen al día de hoy y de todas las diligencias que corroborarán o descartarán las hipótesis, con el fin de conocer el paradero o suerte del joven”, detalló la organización civil Idheas.
“Esta sentencia sienta un importante precedente para las víctimas en Veracruz, que día a día nos enfrentamos a las negativas de conocer los expedientes de las desapariciones de nuestros familiares. Tenemos una nueva esperanza”, comentó la madre.