La liga profesional nipona se reanudó a comienzos de julio después de un parón de cuatro meses debido a la pandemia, y desde el día 10 de ese mismo mes permite la entrada de espectadores en los estadios.
Tokio, 11 de agosto (EFE).- La J-League, la liga profesional de futbol de Japón, ha decidido este martes mantener al menos hasta septiembre el tope de 5 mil espectadores en los estadios para prevenir posibles contagios de coronavirus.
Los organizadores del campeonato nacional nipón optaron por no ampliar la entrada de espectadores hasta la mitad del aforo de los estadios, tal y como estaba inicialmente previsto, durante una reunión extraordinaria entre los representantes ejecutivos de todos los equipos celebrada hoy.
Esta medida fue tomada en el contexto de contagios continuados de coronavirus en Japón, una situación que también ha afectado a la J-League, con varias infecciones entre jugadores y personal de equipos que incluso han obligado a suspender partidos.
El último de estos contagios anunciado hoy mismo afecta al técnico Kim Myung-Hwi, entrenador del Sagan Tosu, en el que militó hasta el año pasado el español Fernando Torres.
La liga profesional nipona se reanudó a comienzos de julio después de un parón de cuatro meses debido a la pandemia, y desde el día 10 de ese mismo mes permite la entrada de espectadores en los estadios aunque con un tope de 5 mil personas y siempre que se pueda mantener una distancia de seguridad interpersonal.
La J-League revisará esta política a finales de agosto, en el marco del protocolo de seguridad elaborado por las autoridades niponas para los eventos deportivos y culturales multitudinarios.
Las medidas preventivas en la liga nipona también incluyen realizar test PCR frecuentes entre jugadores y trabajadores de clubs, la recomendación a los futbolistas de evitar el contacto estrecho en entrenamientos y partidos o la prohibición de gritar y cantar para los espectadores que acudan a las gradas.
Los protocolos aplicados para la vuelta de público a los estadios de béisbol y fútbol, los dos deportes más populares de Japón, son seguidos con atención por los organizadores de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, que podrían inspirarse en estos casos prácticos de cara al evento deportivo internacional previsto para el próximo verano.