Ante la adversidad que atormenta a la Generación Z por una pandemia sumada a una desigualdad estructural, el Gobierno federal les ha echado un lazo a través de los programas de Bienestar como becas y Jóvenes Construyendo el Futuro con una inversión histórica de 416 mil millones de pesos, resaltó la dirección general de IMJUVE.
Ciudad de México, 19 de julio (SinEmbargo).– Más allá de la pandemia por la COVID-19, de manera estructural las juventudes hemos enfrentado con mayor profundidad las desigualdades sistémicas en educación, empleos, accesibilidad, seguridad y bienestar por la «visión clientelar y tutelar» con la que se nos ha tratado durante años, habla en primera persona Guillermo Santiago Rodríguez, director general del Instituto Mexicano de la Juventud (IMJUVE). Pero, prevé, a los niños y jóvenes de la Generación Z los acecha un futuro aún más adverso.
«La Generación Z está más familiarizada con el Internet y las redes sociales. Eso es innegable. Pero por otro lado está enfrentando un mundo más adverso que la generación millennial, porque se han recrudecido las desigualdades», dijo Santiago durante una charla telefónica con SinEmbargo.
En un texto previo este medio informó que más de 32 millones de niños y jóvenes de 8 a 23 años conforman la Generación Z en México, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Además de vivir bajo la amenaza de la crisis climática y la violencia, si tuvieron la oportunidad, al egresar de la universidad los espera un mercado laboral quebrado por la debacle económica derivada de la COVID-19.
Pero el Director General de IMJUVE ve dos aliados en este obscuro camino, donde la economía nacional caerá hasta un 9 por ciento y la mitad de los mexicanos sobrevivirán en situación de pobreza, como estima la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Esto es, la tecnología y los programas de bienestar del Gobierno federal.
«Por más de 80 años tuvimos una visión hacia las y los jóvenes de manera clientelar y tutelar», planteó. «Hoy se están invirtiendo más de 416 mil millones de pesos para personas jóvenes en el país; es una cifra histórica».
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–Desde el Instituto Mexicano de la Juventud (IMJUVE), ¿qué características están viendo de la Generación Z en México?
–En México tenemos 37.5 millones de jóvenes, de los cuales 26 millones tienen entre 12 y 23 años, el sector que nosotros visualizamos como Generación Z [contando a los niños son más de 32 millones de centennials]. Una de las características es que esta generación, como nunca antes, está enfrentando retos muy grandes. Más allá de la pandemia, como tema generacional estructural las juventudes hemos enfrentado con mayor profundidad las desigualdades sistémicas en educación, empleos, accesibilidad, seguridad y bienestar. Tenemos muy presente que será un reto muy importante. Aunque no podemos dejar de ver que, como nunca, estamos entendiendo que los problemas los vamos a poder resolver solo de manera colectiva y comunitaria, lo cual es un gran avance para la sociedad.
–Comparando a los centennials con generaciones pasadas como los millennials, ¿qué los diferencia?
–La Generación Z está más familiarizada con el Internet y las redes sociales. Eso es innegable. Pero por otro lado está enfrentando un mundo más adverso que la generación millennial, porque se han recrudecido las desigualdades. Hoy en día ya no podemos hablar solo del acceso al Internet, sino del acceso a la formación de habilidades y de democratizar el bienestar. En México, como ninguna otra generación, tendrá como aliado al Gobierno que está atendiendo a personas de educación media superior con becas Benito Juárez, Jóvenes Construyendo el Futuro y otros programas dirigidos a jóvenes. Como porcentaje es a la Generación Z que más está beneficiando hoy en día. Este aliado será muy importante para que ellos puedan fortalecer sus habilidades y definir el proyecto de vida que más les parezca.
–Da pie para mi siguiente pregunta, Guillermo. A esta generación le tocó el cambio a un Gobierno denominado de izquierda, ¿les impacta de alguna forma?
–Hay tres cambios muy importantes. El primero es el cambio de visión del Gobierno de México, porque por más de 80 años tuvimos una visión hacia las y los jóvenes de manera clientelar y tutelar, es decir, se les miraba como sujetos que había que cuidar porque podían ser peligrosos o causar daño. Ahora la visión del Gobierno encabezado por el Licenciado Andrés Manuel López Obrador es de inclusión que garantiza el ejercicio pleno de los derechos y fortalece sus capacidades. El segundo cambio es en el tema presupuestal. Hoy se están invirtiendo más de 416 mil millones de pesos para personas jóvenes en el país; es una cifra histórica. Más jóvenes están teniendo la oportunidad de estudiar, capacitarse para un empleo y ya no están migrando tanto. En México, el 60 por ciento de los jóvenes viven en zonas urbanas y el 40 por ciento vive en zonas rurales. Este 40 por ciento por muchos años fue olvidado, marginado y excluido. Por eso se obligó a la migración a ciudades u otros países, pero ahora programas como Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro están logrando que los jóvenes se queden en su tierra, lo que significa bienestar y futuro digno. Y el tercer cambio es que estamos logrando como sociedad reconocer a los jóvenes como personas de derecho, escuchándolos, atendiéndolos y acompañándolos. Desde luego falta mucho camino por recorrer, pero hemos iniciado y vamos por el camino correcto. Las acciones del Gobierno están logrando ir cerrando brechas de desigualdad que durante mucho tiempo se fueron ahondando más.
–La Generación Z vive en medio de diversas crisis. La climática, la económica a partir de la pandemia y la violencia en México. Desde IMJUVE, ¿cómo ven su futuro?
–Será un reto importante para la Generación Z y para todas las generaciones. Pero creo firmemente que hay una gran oportunidad a través de la tecnología. Nos va a permitir cerrar las brechas de desigualdad y las deudas históricas. Estamos trabajando para poder lograr generar un ecosistema donde haya trabajos dignos, salarios dignos y que podamos transitar hacia una sociedad donde la seguridad social no sea exclusiva de unos cuantos. Desde IMJUVE estamos trabajando con la Organización Iberoamericana de Seguridad Social con la finalidad de acompañar las propuestas desde el Ejecutivo respecto al tema de pensiones y seguridad social. Falta mucho, pero seremos los más impactados por este tipo de medidas. Trabajamos para garantizar que las personas jóvenes tengan certidumbre en su futuro.
–Como generaciones pasadas a la Z, ¿qué le debemos a estos niños y jóvenes?
–Las principales deudas que existen y que tenemos que cumplir es terminar con las desigualdades, con la discriminación… Hoy como nunca se está visibilizando la discriminación y ya no se está normalizando. Ese es un avance importantísimo, pero tenemos la obligación de terminar con ella en todas sus formas. No podemos seguir en un mundo en el que se excluyan a las personas por cualquier motivo. Y la tercer deuda es democratizar el bienestar para democratizar la felicidad. Que vivir con bienestar no sea un privilegio, sino un derecho de todas las personas.