La cifra es más alta que la reportada en un estudio por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) que señaló que con la crisis, hasta 10.7 millones de personas caerán en la pobreza extrema por ingresos en México.
México, 11 julio (EFE).- La pandemia de la COVID-19 en México ha provocado que por lo menos 16 millones de personas cayeran en situación de pobreza extrema por ingresos, según un estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) publicado este sábado.
Un informe del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo (PUED), de la UNAM, señala que se debió a factores como la pérdida de empleos y de los consiguientes ingresos, debido a las medidas de distanciamiento social, medidas que detuvieron a la economía.
«Considerando la peor situación, el volumen de pobres extremos por ingreso habría alcanzado en mayo de 2020 la cantidad de 38 millones de personas, esto es 16 millones más que en febrero del mismo año (22 millones)», señala el estudio.
La cifra es más alta que la reportada en un estudio por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) que señaló que con la crisis, hasta 10.7 millones de personas caerán en la pobreza extrema por ingresos en México.
Mientras que según la metodología del Coneval, el organismo que mide la pobreza en México, y las estimaciones del Producto Interior Bruto (PIB) para 2020, el banco BBVA México calculó que la crisis sanitaria en este país dejaría unos 12,3 millones de personas en pobreza extrema.
Por otra parte, el PUED señaló que para asegurar la adquisición de la cesta de alimentos básicos en beneficio de 32 millones de personas en condiciones de pobreza extrema, México debe llevar a cabo transferencias en los próximos meses de 15.000 millones de pesos (unos 670 millones de dólares) mensuales.
Señaló que el costo fiscal anualizado representaría el 2.9 por ciento del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2020, o el 0.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), de acuerdo al más reciente estudio del PUED, realizado entre febrero y mayo del presente año.
Señalaron que las estimaciones del PUED y del Coneval permiten mendir «los posibles impactos de la contracción económica en el ingreso de la población más pobre».
En el texto se apuntó que con base en un conjunto razonable de supuestos, los resultados de los estudios de ambos organismos indican que probablemente las transferencias realizadas hasta el momento por la administración del Presidente Andrés Manuel López Obrador «no tendrían un impacto significativo para mitigar la crisis que vive la población».
Por ello, en el documento el PUED «urge a que en las próximas semanas se realicen nuevas transferencias de ingreso a esta población, para evitar que se agudice su situación y se les prive de sus derechos sociales».