Artistas y ejecutoivos afroamericanos aseguran que Hollywood y los principales medios de comunicación han contribuido a la criminalización de los negros, la tergiversación del sistema legal y la glorificación de la corrupción y la violencia policial.
Los Ángeles (EU), 23 jun. (EFE).- Una carta abierta firmada por más de 300 artistas y ejecutivos afroamericanos pidió este martes a los principales estudios de Hollywood que cesen aquellos proyectos que «glorifican» la violencia y corrupción policial.
Viola Davis, Michael B. Jordan, Janelle Monae, Billy Porter, Issa Rae, Idris Elba y Chadwick Boseman son varias de las celebridades que han firmado la misiva escrita por el actor Kendrick Sampson («Insecure,» «Miss Juneteenth») y Tessa Thompson (“Avengers: Endgame») en colaboración con el movimiento Black Lives Matter.
La carta, distribuida por el diario Variety, se dirige a «los aliados de Hollywood».
«Hollywood tiene un privilegio como industria creativa para imaginar y crear. Tenemos una influencia significativa sobre la cultura y la política. Tenemos la capacidad de usar esa influencia para imaginar y crear un mundo mejor», arranca.
«La forma en que Hollywood y los principales medios de comunicación han contribuido a la criminalización de los negros, la tergiversación del sistema legal y la glorificación de la corrupción y la violencia policial ha tenido graves consecuencias», denuncia.
De acuerdo con los firmantes, las producciones que «glorifican» ciertos comportamientos policiales y que cuentan con representaciones estereotipadas de la comunidad afroamericana han fomentado ciertos estigmas y «contribuido a los asesinatos de personas negras» a manos de agentes de policía.
«Debemos poner fin a la exaltación de oficiales y agentes que son brutales y actúan fuera de la ley como héroes», impera la carta.
Por ello, el grupo demanda a la industria de Hollywood que «se desprenda de la policía y del contenido antinegro», e insta a que a invierta en «contenido antirracista» y en fomentar la inclusión y diversidad, una de las asignaturas pendientes del sector audiovisual que tanto se ha debatido en los últimos años, especialmente en la temporada de premios.
«Cada vez que se pasa por alto a un ejecutivo o asistente negro para una promoción, o el presupuesto de publicidad y producción para otra película dirigida por negros es limitado, o cuando los agentes negros no son apoyados y los escritores negros quedan excluidos -señala-. Esto nos da menos control sobre nuestras narrativas».