Así que López Obrador dijo que, para el comienzo del próximo año escolar, en agosto o septiembre, insistirá en que los feriados se celebren en su fecha histórica real. Eso generó un diluvio de críticas en redes sociales, donde muchos mexicanos lamentaron la pérdida de los fines de semana largos.
Ciudad de México, 6 de febrero (AP).-El Presidente de México Andrés Manuel López Obrador presentó una propuesta sumamente impopular de poner fin a la práctica de mover los feriados oficiales al lunes más cercano y crear fines de semana largos.
López Obrador, estudioso de la historia de México, se irritó al enterarse de que muy pocos ciudadanos recuerdan que el miércoles 5 de febrero se cumplió el aniversario de la adopción de la Constitución Nacional, en 1917.
Este año el feriado se movió a lunes para para crear un fin de semana de tres días. La práctica es similar a la implementada para el Día de los Caídos o el cumpleaños de George Washington en Estados Unidos.
López Obrador fustigó la práctica, quejándose de que provoca que la gente olvide el motivo de la celebración, si bien reconoció que los fines de semana largos son muy populares.
«Sé que esto va a generar alguna polémica, pero considero que el que no sabe de dónde viene, nunca va a saber hacia dónde va. Para nosotros es fundamental la historia, que es la maestra de vida, es fundamental el civismo, la ética, el humanismo», declaró el mandatario.
Así que López Obrador dijo que, para el comienzo del próximo año escolar, en agosto o septiembre, insistirá en que los feriados se celebren en su fecha histórica real. Eso generó un diluvio de críticas en redes sociales, donde muchos mexicanos lamentaron la pérdida de los fines de semana largos.
En Twitter, el hashtag #Conlospuentesno era la tendencia principal en México. Un usuario colocó una imagen con un apretón de manos, simbolizando que tanto simpatizantes como críticos del Presidente («chairos» y «derechairos») estaban unidos: «Hoy no hay divisiones, hoy todos somos uno mismo. #Conlospuentesno».
Isra Piatrov expresó el sentir de muchos mexicanos al tuitear: «Vivimos en un país con las jornadas laborales más largas, donde un gran porcentaje de la población invierte más de una hora en trasladarse a su trabajo y los puentes suelen ser un respiro para todos, aunque sean 9 de los 366 o 365 días restantes».
José Manuel López Campos, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo, dijo que eliminar los fines de semana largos podría perjudicar a las familias y a la economía, y provocar el ausentismo en las escuelas y lugares de trabajo, incluso cuando México debe volverse más productivo y competitivo con el inminente nuevo acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá.
“La idea de correr esos días inhábiles al lunes anterior es para ordenar los días de asueto y fomentar el turismo social, además de generar mejores condiciones de bienestar para los trabajadores y educandos”.
También dijo que afectaría el fin de semana largo del Día de la Revolución en noviembre, que se ha convertido en sinónimo del llamado “buen fin”, en donde las tiendas ofrecen descuentos y pagos a meses sin intereses, y extienden sus horarios para iniciar con la temporada de compras navideñas, algo similar a el “Viernes Negro” en Estados Unidos.
El año pasado, el “buen fin” generó unos 120 mil millones de pesos (6 mil 500 millones de dólares) en actividad económica, dijo López Campos.