El Gobierno interino de Bolivia presentó en noviembre pasado contra él una denuncia en la Fiscalía en La Paz por delitos como terrorismo, al acusarle de incitar a la violencia contra el Ejecutivo provisional de Áñez desde su asilo en México.
La Paz, 18 dic (EFE).– La Fiscalía boliviana emitió este miércoles una orden de aprehensión en contra del ex Presidente Evo Morales, a quien el Gobierno interino de Jeanine Áñez ha acusado por los supuestos delitos de sedición y terrorismo.
El Ministro interino de Gobierno (Interior), Arturo Murillo, compartió en Twitter una fotografía del documento en el que se ordena aprehender a Morales, refugiado en Argentina, y trasladarlo ante la Fiscalía Especializada Anticorrupción para «prestar su declaración informativa».
«Sr. @evoespueblo (la cuenta de Morales en Twitter) para su conocimiento», escribió Murillo.
El Gobierno interino de Bolivia presentó en noviembre pasado contra él una denuncia en la Fiscalía en La Paz por delitos como terrorismo, al acusarle de incitar a la violencia contra el Ejecutivo provisional de Áñez desde su asilo en México.
Sr. @evoespueblo para su conocimiento pic.twitter.com/1KrAFcevjQ
— Arturo Murillo (@ArturoMurilloS) December 18, 2019
La denuncia se sustenta en pruebas como un video en que se escucha una voz atribuida a Morales, cuya autenticidad no ha sido demostrada por fuentes independientes.
La voz, por teléfono supuestamente desde México, incita a un dirigente cocalero en Bolivia, contra quien también hay una orden de aprehensión, a mantener bloqueadas las ciudades para impedir el ingreso de alimentos.
Evo Morales se encuentra en Argentina desde la semana pasada procedente de México, a donde llegó como asilado tras salir del Bolivia el pasado 11 de noviembre.
Morales dimitió el pasado 10 de noviembre denunciando un golpe de Estado para derrocarlo, tras publicarse esa misma jornada un informe previo de la Organización de Estados Americanos (OEA) que advertía «graves irregulares» en las elecciones del 20 de octubre en las que fue declarado vencedor para un cuarto mandato consecutivo.
El informe final de la OEA estableció una «manipulación dolosa» en las elecciones, ahora anuladas por una ley de urgencia que prevé nuevos comicios a comienzos de 2020, aún sin fecha.
Morales, que ha pedido ser acogido como refugiado en Argentina, aseguró el martes en una rueda de prensa en ese país que fue víctima de un «golpe de Estado» y que no teme ser detenido.
ARGENTINA CONCEDE REFUGIO A EVO Y NO PODRÁ SER EXTRADITADO
El ex mandatario de Bolivia, Evo Morales, recibió la confirmación de su estatus de «refugiado» en Argentina, lo que, según el Gobierno, imposibilita «cualquier posibilidad de extradición», informaron este miércoles a Efe fuentes oficiales.
Morales llegó al Aeropuerto Internacional de Ezeiza (Buenos Aires) el pasado 12 de diciembre y allí cursó la solicitud, que fue resuelta positivamente, según añadieron brevemente las fuentes de la Dirección Nacional de Migraciones.
Hasta ahora, el estado de la solicitud del ex Presidente no había sido detallado públicamente de forma oficial por ninguna institución del Gobierno argentino, que considera a Morales un «perseguido político» en su país.
El jueves pasado, el Canciller argentino, Felipe Solá, aseguró que para la concesión de ese estatus, el político debería fijar un domicilio en el país y declaró que desde el momento en que alguien solicita ser refugiado se imposibilita «cualquier posibilidad de extradición».
La Guía de la Comisión Nacional para los Refugiados (organismo que depende del Ministerio del Interior y se encarga de estudiar las peticiones) remarca que entre los derechos de las personas que obtienen esa condición está «no ser devueltos, expulsados o extraditados al país donde su vida, integridad, libertad o seguridad estén en peligro».
Justo este miércoles, la Fiscalía boliviana dictó una orden de aprehensión contra el exmandatario por «terrorismo» y «sedición».
El Gobierno interino de Bolivia presentó en noviembre pasado contra él una denuncia en la fiscalía en La Paz por delitos como terrorismo, al acusarle de incitar a la violencia contra el Ejecutivo provisional desde su asilo en México.
La llegada de Evo Morales a Argentina se produjo dos días después de la asunción del nuevo Presidente, el peronista Alberto Fernández, con el que mantiene simpatías políticas y con quien cenó el pasado domingo, en compañía de la Vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner.
Durante los últimos días, Morales mantuvo una ajetreada agenda de reuniones con dirigentes políticos de Argentina y Bolivia y concedió entrevistas a algunos medios de comunicación del país.
Junto a Evo Morales, llegaron al país el ex Vicepresidente de Bolivia Álvaro García Linera y el ex Canciller Diego Pary.
Desde el 11 de noviembre hasta el 12 de diciembre, Evo Morales permaneció asilado en México (con una breve visita médica a Cuba) después de que las Fuerzas Armadas le instaran a renunciar a la Presidencia de Bolivia tras haber cometido presuntamente irregularidades en los comicios en los que buscaba un cuarto mandato.
Tras su renuncia, se formó un Gobierno interino liderado por Jeanine Áñez, al que Morales considera fruto de un «golpe de Estado» en su contra.
Morales reiteró en varias ocasiones que no será candidato a las próximas elecciones anunciadas por Áñez (aún sin fecha prevista), pero será el jefe de campaña de su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS).