Petróleos Mexicanos, que alguna vez fue la tercera productora de petróleo del mundo, agudizó su caída en 2015 al pasar al octavo sitio con una mayor dependencia energética. En este nuevo sexenio, el Presidente Andrés Manuel López Obrador puso como uno de sus ejes el rescate de la petrolera.
A pesar de las pérdidas registradas en el tercer trimestre de 2019, la empresa redujo 6.1 por ciento de su deuda en ese periodo y de diciembre de 2018 a septiembre de este año, contuvo la caída de su producción y compró menos gasolinas, diesel, gas natural y gas LP.
Ciudad de México, 30 de octubre (SinEmbargo).– A pesar de que la nueva administración de Petróleos Mexicanos (Pemex) logró contener su caída en la producción, se redujeron las exportaciones y la deuda, tres de los objetivos de su Plan de Negocios 2019-2023, las finanzas de la empresa se encuentran comprometidas y se ve difícil que cumplan sus metas, sobre todo sin la ayuda de privados, coincidieron analistas en materia de energía.
Sin ese capital privado será difícil que la petrolera mexicana pueda superar sus problemas financieros e invertir al mismo tiempo, señalaron David Shield, analista de la industria energética y director general de la revista Energía Debate, y Gonzalo Monroy, analista energético.
El lunes, la petrolera dirigida por Octavio Romero Oropeza reportó una pérdida de 87 mil 900 millones de pesos durante el tercer trimestre de 2019 y el acumulado de los primeros nueve meses del año es de 176 mil 367 millones de pesos.
Esta pérdida, sin embargo, se mantiene en los niveles que viene reportando la petrolera en años pasados. «Es una pérdida que está a los niveles de Pemex, esto se parece a algo muy similar a lo que tuvimos en 2017, cuando la pérdida del año fue de 16 mil millones de dólares. No es tan catastrófica como la de 2015, cuando Pemex perdió 35 mil millones de dólares por la subida de los precios», explicó en entrevista Gonzalo Monroy, analista energético.
En términos de la inversión, agregó el analista, «Pemex trae un subejercicio importante, sobre todo en la parte de las refinerías, se han ejercido poco menos de 11 millones de dólares, pero hay otro problema que no aparece en los reportes por ningún lado, que son todos los contratistas a los que no se les ha pagado, hay reportes que hablan de 7 mil millones de dólares, y cuando se pague esa deuda van a cambiar los números que estamos viendo ahorita».
En julio pasado, Pemex presentó su Plan de Negocios para este sexenio, el cual incluye una inversión de 141 mil millones de pesos entre 2020 y 2022, la reducción de la carga fiscal y deuda, además de elevar la producción de petróleo.
Sobre este plan, el analista Gonzalo Monroy consideró que Pemex va retrasado. «Su meta para este año eran 47 pozos perforados, que iban a dar un estimado de 20 campos, los cuales iban a ser la base del crecimiento de 2020, pero el problema es que hasta septiembre solo se han perforado 19 pozos y de ellos, solo tres han sido descubrimientos comerciales. Con estos resultados es imposible alcanzar la meta de los 2.6 millones de barriles que estaba planeando la administración en este rescate de Pemex».
LAS SEÑALES POSITIVAS
Petróleos Mexicanos, que alguna vez fue la tercera productora de petróleo del mundo, en 2015 pasó a ser la octava, agudizando su caída en el sexenio de Enrique Peña Nieto. La otrora empresa estrella del Estado mexicano tiene, hasta 2018, 15 años consecutivos produciendo menos gasolina, diésel y gas natural, situación que derivó en una mayor dependencia energética del país.
En la administración pasada, Pemex dejó de estar en el centro de las finanzas públicas, se dejó de invertir en la petrolera y como consecuencia los indicadores operativos cayeron. Sin embargo, en este nuevo sexenio, el Presidente Andrés Manuel López Obrador puso como uno de sus ejes el rescate de la petrolera, y a pesar de las pérdidas registradas en el tercer trimestre de 2019, la empresa redujo 6.1 por ciento de su deuda en ese periodo y de diciembre de 2018 a septiembre de este año, contuvo la caída de su producción y compró menos gasolinas, diesel, gas natural y gas LP.
«Lo de la deuda de Pemex es de lo que mejor se ha hecho, imperó la prudencia, no hicieron cosas espectaculares, no siguieron contratando deuda, de hecho ya bajó en 5 mil millones de dólares, lo cual no es poca cosa, eso no ocurría desde el Gobierno de Calderón. Lo que hicieron fue contratar y refinanciar deuda», aseguró el analista Monroy.
David Shields, director general de la revista Energía Debate, también coincidió: «Creo que el Gobierno está haciendo un gran esfuerzo con la deuda de Pemex, en renegociar algunos aspectos y quitarle la carga fiscal, pero el problema es muy grande».
Una revisión a las estadísticas de Petróleos Mexicanos arrojó que de diciembre de 2018 a septiembre de este año, la producción de crudo creció 1.34 por ciento, la del gas natural 2.78 por ciento, Gas LP 6.16 por ciento, gasolinas un 17.39 por ciento y el diesel 35.14 por ciento.
Estas cifras reflejan que en nueve meses de la presente administración, la producción de hidrocarburos ha tenido algunos avances.
En el tema de las importaciones, los datos destacan una reducción, es decir, Pemex está dejando de comprar hidrocarburos a otros países, uno de los objetivos de la actual administración. Las importaciones de gas natural se redujeron 1.47 por ciento de diciembre de 2018 a septiembre de 2019. Lo mismo ocurre con el Gas LP (–36.11 por ciento), gasolinas (–25.10 por ciento) y diesel (–32.93 por ciento).
El tema del huachicol (robo de combustible) es otro de los aspectos positivos en la actual administración. El lunes, el director de Petróleos Mexicanos, Octavio Romero Oropeza, destacó el combate a este delito en su comparecencia ante diputados.
Aseguró que el robo de combustible pasó de 74 mil barriles diarios a cinco mil. Dijo que en los primeros nueve meses del 2018, la pérdida de combustible fue de 27 mil 500 millones; mientras en el mismo periodo de 2019, sólo se han sustraído 3 mil 700.
«Un dato positivo en la comparecencia del director de Pemex fue el combate al huachicol, por desgracia no hay forma de comprobarlo», dijo el analista Gonzalo Monroy.
En su comparecencia Romero Oropeza también destacó que cada año buscarán desarrollar 20 nuevos campos, a fin de impulsar la exploración y producción de petróleo en el país.
“Año con año vamos a desarrollar por lo menos 20 nuevos campos. Ya nosotros tenemos programado la firma de los contratos de los próximos 20 campos de 2020”, dijo el titular de Pemex y profundizó que la estrategia también busca el desarrollo de campos en aguas someras y tierra.
Para Gonzalo Monroy, esta apuesta por los campos exploratorios es preocupante: «Preocupa también que le están apostando a los pozos exploratorios, no hay un plan B si sale algo mal».
PEMEX NECESITA A PRIVADOS
Los analistas en materia de energía consideran que sin socios, Pemex no podrá alcanzar sus metas. «Nos tocaría ver qué sigue para adelante, por ejemplo, en Brasil están teniendo éxito en sus rondas de licitación y se logró poner 2 mil 200 millones de dólares, mientras que México no tiene nada», dijo Monroy.
En el Plan de Pemex 2018-2019 desaparecen los farmouts (asociaciones con empresas privadas) y en su lugar se propone elevar la producción con la implementación de los Contratos de Servicios Integrales de Exploración y Extracción (CSIEEs).
“Considero que el Plan de Negocios de Pemex es muy conservador, tradicionalista en cuanto a contratos petroleros, son modelos poco atractivos para los contratistas porque tienen que meter dinero por delante”, dijo a SinEmbargo David Shields, analista de la industria energética y director general de la revista Energía Debate en una entrevista publicada en julio pasado.