Aunque el álbum «Western Stars», editado en junio, supuso su regreso discográfico tras cinco años sin nuevos temas (su anterior trabajo de estudio era «High Hopes», de 2014), Springsteen casi ha aparecido más en los titulares en los últimos meses por su presencia en las pantallas que por sus canciones.
Por David Villafranca
Los Ángeles, 22 de septiembre (EFE).- Muy pocos mitos del rock están a su altura, pero Bruce Springsteen celebrará mañana su 70 cumpleaños no tanto pensando en la música sino más bien con un ojo puesto en el cine debido a su inminente debut como director.
Aunque el álbum «Western Stars», editado en junio, supuso su regreso discográfico tras cinco años sin nuevos temas (su anterior trabajo de estudio era «High Hopes», de 2014), Springsteen casi ha aparecido más en los titulares en los últimos meses por su presencia en las pantallas que por sus canciones.
Así, «The Boss» acudió la pasada semana al Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF) para estrenar el documental Western Stars, que ha dirigido junto a Thom Zimny y en donde interpreta todas las canciones del álbum homónimo en un pequeño recinto y rodeado de amigos mientras reflexiona, asimismo, sobre su trayectoria y sus obsesiones personales.
A pesar de que las primeras críticas desde Toronto han alabado el filme, Springsteen ha admitido que, en parte, este documental es un regalo a sus fans para compensar que no habrá gira para presentar «Western Stars», un álbum que ahonda en la melancolía y la nostalgia a partir de un sonido íntimo que bebe del country y el folk.
«Es una extensión, como si los atara, de los hilos filosóficos en los que he estado trabajando toda mi vida desde que era niño», comentó Springsteen sobre el documental en un coloquio posterior a su estreno en Toronto.
«Hay dos caras del carácter estadounidense: la cara solitaria y la cara que anhela conexión y comunidad. Eso ha sido un viaje de por vida para mí: tratar de resolver cómo ir de uno al otro, cómo reconciliar esas dos cosas», añadió.
Con un evidente aroma crepuscular y de vaquero que, por un momento, se baja del caballo y hace repaso tanto de sus aventuras como de sus fracasos, el documental Western Stars sigue la estela de su autobiografía Born to Run (2016) y de su obra teatral «Springsteen on Broadway» (2017-2018), dos claras muestras del reciente interés del músico por echar un vistazo a su legado.
Congratulations to Thom Zimny on winning the Emmy Award for Outstanding Directing for a Variety Special with ‘Springsteen On Broadway.’ pic.twitter.com/zdSJguTTWw
— Bruce Springsteen (@springsteen) September 16, 2019
No obstante, el rockero conserva el humor y, preguntado en Toronto sobre qué va después de ser escritor, autor teatral y ahora director de cine, respondió con ironía que quizá pruebe con la lucha libre.
Su debut como director en Western Stars, que se estrenará en EU el 25 de octubre, no es la única vez que se ha relacionado a Springsteen con el cine este año, ya que acaba de llegar a la gran pantalla la película Blinded by the Light en las que las canciones del músico de Nueva Jersey son la clave principal de la trama.
Con la cineasta Gurinder Chadha (Bend it like Beckham, 2002) tras la cámara, Blinded by the Light narra la historia de un joven británico de ascendencia paquistaní que, en el conservador Reino Unido de los años 80 de Margaret Thatcher, encuentra una vía de liberación y esperanza personal en los temas de Springsteen.
Nuevo ejemplo de cruce entre cine y música tras las recientes Bohemian Rhapsody (2018) sobre Queen, Rocketman (2019) sobre Elton John y Yesterday (2019) sobre The Beatles, la banda sonora de esta película incluye canciones con la firma de Springsteen como «Dancing in the Dark», «The River», «Blinded by the Light» o «Born to Run».
Además, su espectáculo teatral «Springsteen on Broadway» llegó a la pantalla, la pequeña en este caso, con un documental estrenado el pasado diciembre por Netflix, plataforma que trató a esta cinta como todo un acontecimiento.
A la espera de si en algún momento se anima a convertirse en actor (por ahora sólo ha tenido cameos como su divertida aparición en la cinta High Fidelity de 2000), Springsteen puede presumir de haber sido ya protagonista en la gran gala del cine gracias al Óscar que ganó a la mejor canción original por «Streets of Philadelphia» de la película Philadelphia (1993).