Las remuneraciones medias reales pagadas a personas empleadas cayeron 0.1 por ciento mensual y 1.8 puntos anuales.
Por tipo de contratación, en junio ingresaron menos obreros en un 0.2 por ciento, en tanto que, creció el número de empleados en 0.2 puntos. A tasa anual la cifra fue de un crecimiento de 0.7 por ciento de obreros y de 2.7 de personas empleadas.
Ciudad de México, 19 de agosto (SinEmbargo).- Las remuneraciones medias reales pagadas a obreros durante el mes de junio crecieron 2.1 por ciento a tasa anual, pese a que respecto al mes anterior descendió 1.1 por ciento.
De acuerdo con las cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) con base en la Encuesta Mensual de la Industria Manufacturera (EMIM) el personal ocupado total en el sector manufacturero cayó 0.1 por ciento a tasa mensual, pero creció 1 por ciento respecto al mismo mes de 2018.
Las horas trabajadas fueron menores en 0.2 por ciento con respecto al mes anterior, pero frente al año anterior, estas aumentaron 0.7 por ciento.
Las remuneraciones medias reales pagadas a personas empleadas cayeron 0.1 por ciento mensual y 1.8 puntos anuales, pero referente a las prestaciones sociales también se reportó un descenso anual y mensual, de 0.9 y 0.2 por ciento, respectivamente.
Las remuneraciones incluyen sueldos, salarios y prestaciones sociales y cayeron 0.5 por ciento en el sexto mes de 2019 con relación a las del mes que le precede, pero aumentaron 1.2 por ciento anual.
Por tipo de contratación, en junio ingresaron menos obreros en un 0.2 por ciento, en tanto que, creció el número de empleados en 0.2 puntos. A tasa anual la cifra fue de un crecimiento de 0.7 por ciento de obreros y de 2.7 de personas empleadas.
MÁS EMPLEO CON BAJO SUELDO
La única manera de reducir la pobreza en forma duradera es la creación de empleos, pero también es importante que éstos sean de la mayor calidad posible, consideró el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
En su Análisis Económico Ejecutivo explicó que aunque los niveles de ocupación han ido en aumento -un alza 1,151,462 ocupados respecto al mismo trimestre del año pasado-, hay señales significativas que apuntan a un deterioro de la calidad del empleo.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) que publica el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) al segundo trimestre del año las personas ocupadas en el país sumó un total de 54 millones 936 mil 719 personas, lo que contribuyó para que la gente desocupada representara sólo 3.5 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA).
El CEESP indicó que para asegurar la calidad en los empleos se debe tener jornadas laborales e ingreso suficiente que permita satisfacer las necesidades familiares y que cuente con servicios de salud. “Ésas son señales claras de la reducción de la pobreza. Sin embargo, en este último frente, los indicadores de ocupación apuntan a la necesidad de mejorar la calidad de los puestos de trabajo que se generan en la economía, además de que concentran en los niveles salariales más bajos, agudizando la precariedad del mercado laboral y con bajo impacto en la dinámica del consumo”, apuntó.
Añadió que el país requiere empleo de calidad para 6,262,263 personas (suma de desocupación y subocupación registrada en el segundo trimestre del año), cifra mayor en 576,043 a la del mismo periodo del año pasado.