El arresto de Rocky llevó al presidente de Estados Unidos Donald Trump a intervenir en nombre del rapero encarcelado y desató una inusual discusión diplomática cuando fiscales suecos acusaron al artista de 30 años el jueves. El caso también llamó la atención de celebridades estadounidenses como Kim Kardashian West y los cantantes Sean «Diddy» Combs y Justin Bieber.
Helsinki, 26 de julio (AP).– El hombre que supuestamente fue agredido por el rapero estadounidense A$AP Rocky y otros dos hombres en Estocolmo fue pateado mientras yacía en el suelo y golpeado con una botella, dijeron fiscales suecos en documentos de la corte obtenidos el viernes por The Associated Press.
Las 500 páginas también incluyen alegaciones de que Rocky empujó al hombre al piso, y fotos de sus cortadas, magulladuras y ropa ensangrentada.
El rapero nominado al Grammy y los otros dos «deliberadamente, juntos y de acuerdo», atacaron el 30 de junio al hombre identificado como Mustafa Jafari, dijeron los fiscales en documentos presentados en el Tribunal de Distrito de Estocolmo.
Rocky, cuyo verdadero nombre es Rakim Mayers, ha dicho que actuó en defensa propia. Permanece detenido desde el 3 de julio y enfrenta tres cargos que conllevan una sentencia máxima de dos años de prisión.
Un abogado de Jafari, Magnus Stromberg, dijo que la supuesta golpiza comenzó cuando uno de los guardias de A$AP Rocky «lo agarró por el cuello y lo arrastró». Jafari no provocó el ataque, y «esta situación ha sido muy estresante para él», dijo Stromberg.
«No había razones, ninguna en absoluto, para el uso de tanta violencia», señaló.
El arresto de Rocky llevó al presidente de Estados Unidos Donald Trump a intervenir en nombre del rapero encarcelado y desató una inusual discusión diplomática cuando fiscales suecos acusaron al artista de 30 años el jueves.
Trump publicó dos tuits en los que llamó a Suecia a que «¡Traten a los estadounidenses con justicia!» y criticó al primer ministro sueco Stefan Lofven, con quien había hablado directamente, «por ser incapaz de actuar».
Un vocero de Lofven respondió enfatizando la independencia del sistema judicial sueco.
El caso también llamó la atención de celebridades estadounidenses como Kim Kardashian West y los cantantes Sean «Diddy» Combs y Justin Bieber.
El rapero y los otros dos sospechosos, que han sido descritos como miembros de su séquito, permanecerán bajo custodia hasta el juicio.
«Me dio pánico y me asusté mucho. Estaba en shock», uno de los sospechosos, que dijo que era de Nueva York, declaró a la policía. «Me defendí, usé violencia…. Me encontré en una situación en la que temí por mi vida».
Los fiscales recomendaron que el Tribunal de Distrito de Estocolmo aparte tres días para el juicio, que el abogado defensor Slobodan Jovicic dijo que espera que comience el martes.
Trump tuiteó el sábado que había hablado con Lofven sobre el caso y que se ofreció «a responder personalmente por su fianza», aun cuando esto es algo que no se hace bajo las leyes suecas. Alentado por la primera dama y personalidades que incluyen a Kardashian West, el presidente había dicho que intervendría para tratar de liberar a Rocky.
El secretario de prensa de Lofven, Toni Eriksson, dijo más tarde que los dos líderes tuvieron una conversación «amigable y respetuosa» en la que Lofven «se aseguró de enfatizar la total independencia del sistema judicial sueco, los fiscales y las cortes», e insistió en que el gobierno no puede y no intentará influir en los procesos legales.