En México aún hay un largo camino que recorrer para la comunidad LGBT+. De acuerdo con datos de una encuesta realizada por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y el Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación (Conapred), 6 de cada 10 personas encuestadas de la comunidad LGBT+ sufrió discriminación en el último año y más de la mitad (53 por ciento) reportó haber sufrido expresiones de odio, agresiones físicas y acoso.
–Información en desarrollo
Ciudad de México, 29 de junio (SinEmbargo).– Al grito de: “esta marcha no es de fiesta, es de lucha y de protesta”, personas trans, lesbianas y homosexuales llenaron los dos carriles del Paseo de la Reforma y avanzaron hacia el Zócalo capitalino, en la 41 edición de la Marcha del Orgullo Gay en la Ciudad de México.
Intercalados con contingentes de consorcios empresariales, grupos de activistas por los derechos de las personas trans se sumaron también a los contingentes que acompañaron la movilización.
Pasado el mediodía, carros alegóricos y cientos de personas con banderas multicolores bailaron al ritmo de las batucadas y la música electrónica, con la que recorrieron las calles del centro de la Ciudad de México.
“Te lo digo yo, tú madre: así tal como eres te amo”, expresó una mujer en una pancarta multicolor.
“Queremos amor, queremos una cama, queremos que no nos corran de nuestras casas, queremos respeto”, gritó por otro lado un colectivo queer. Familias con niños y niñas ataviados con collares de flores de colores y banderas “del orgullo” vieron pasar a los contingentes.
Como si se tratara de un carnaval, algunas personas vistieron trajes de baño decorados con lentejuelas, usaron tacones y adornaron sus cabellos con coronas o penachos.
Las consignas se apagaron por el fuerte ruido de la música y la fiesta tomó las calles. Burbujas surcaron el cielo y llenaron de fiesta a bailarines en zancos, ataviados con ropas blancas y pelucas.
La música y los bailes no lograron apagar la consignas. “¡No que no, si que sí, ya volvimos a salir!”, gritaron en tandas las personas que celebraban la diversidad.
En medio de los contingentes multicolor, grupos de la llamada “marea verde” exigieron la legalización del aborto como derecho.
En México aún hay un largo camino que recorrer para la comunidad LGBT+. De acuerdo con datos de una encuesta realizada por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y el Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación (Conapred), 6 de cada 10 personas encuestadas de la comunidad LGBT+ sufrió discriminación en el último año y más de la mitad (53 por ciento) reportó haber sufrido expresiones de odio, agresiones físicas y acoso.
La Encuesta sobre Discriminación por motivos de Orientación sexual e Identidad de Género 2018 detalla que el 57.9 por ciento cree que hay poco respeto a los derecho de las personas LGBT en México; 50.4 por ciento cree que hay pocas medidas para promover el respeto a los derechos humanos de las personas LGBT.
El 59.8 por ciento de la población LGBT encuestada se sintió discriminada en el último año por motivos como su tono de piel, su manera de hablar o de expresarse, su forma de vestir, su clase social, su aspecto físico y otras.
Sin embargo, las personas con otra identidad de género no normativa son las que se sienten discriminadas con más frecuencia (80.2 por ciento de los encuestados). El 74.8 por ciento de los hombres trans encuestados dijo que se ha sentido discriminado; del mismo modo se manifestó el 74.4 por ciento de las mujeres trans; el 64.6 por ciento de las mujeres bisexuales; el 59.1 por ciento de los hombres bisexuales.
Así como el 58.8 por ciento de las personas con otra orientación sexual no normativa; el 55.9 por ciento de gays, y el 54.9 por ciento de lesbianas encuestadas.
Además el 25.3 por ciento dijo que se le ha negado injustificadamente algún derecho. En este rubro son las mujeres trans (53.3 por ciento) y los hombres trans (40.9 por ciento), quienes manifestaron que les han sido negados más derechos.
La encuesta también arroja que manifestar abiertamente la orientación sexual o identidad de género expone a las personas a mayor discriminación en el trabajo.
Las mujeres trans (39.8 por ciento) son las que más manifestaron haber sentido un trato desigual respecto a los beneficios, prestaciones labores o ascensos; le siguen los hombres trans con 30 por ciento, las personas con otra identidad de género no normativa (24.8 por ciento), las lesbianas (22.9 por ciento) y los gays (20.6 por ciento).