El pasado viernes, en Minatitlán fueron asesinadas a balazos 13 personas, entre ellas un menor. En redes sociales le fue reclamado al Presidente por haberse pronunciado sobre temas políticos, pero no de la tragedia.
El Jefe del Ejecutivo federal insistió en que su Gobierno trabaja para acabar con la corrupción y que haya justicia para que también haya seguridad. Dijo que sus “adversarios” quisieran que él les haga caso y abandone sus propósitos.
Ciudad de México, 23 de abril (SinEmbargo).– El Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo esta mañana que la exigencia de paz en México es “básicamente” un tema de “los conservadores”, como suele calificar a sus adversarios.
Reclamó directamente y en varias ocaciones al periódico Reforma, e incluso lo acusó de haber publicado su dirección personal en la nota en la que daba cuenta de la amenaza que le hizo el Cártel de Santa Rosa de Lima el viernes pasado.
–¿Piensa que la exigencia de paz es exclusiva de los conservadores? –le cuestionó un reportero.
–Básicamente. Básicamente. Sobre todo promovida, auspiciada. Es cosa de ver las columnas –respondió.
Criticó que Reforma, que “aunque habla de ética”, publicó la manta en la que hay una amenaza en su contra y puso también la dirección de su casa. “¿Por qué poner la manta con la dirección? No lo hicieron otros medios. ¿No les parece de mal gusto, dónde está la ética? ¿Qué no se la dan de gente de bien? No, es un conservadurismo muy peculiar”, añadió.
También consideró “que lo de Minatitlán lo utilizaron con ese propósito: ‘a ver dónde está Andrés Manuel que no se manifiesta, que no se solidariza’”. Aseguró que lo que a él le impulsa es su “amor al pueblo” y que ha visitado como ningún otro líder político y social a esa población.
El pasado viernes, en Minatitlán fueron asesinadas a balazos 13 personas, entre ellas un menor, que se encontraban en una fiesta. En redes sociales le fue reclamado al Presidente por haberse pronunciado sobre temas políticos, pero no de la tragedia.
El Jefe del Ejecutivo Federal insistió en que su Gobierno trabaja para acabar con la corrupción y que haya justicia para que también haya seguridad. Dijo que sus “adversarios” quisieran que él les haga caso y abandone sus propósitos.
“Yo he ido a Minatitlán 50 veces, más que ningún dirigente social, político”, dijo que desde el primer momento del ataque en una fiesta se está atendiendo el problema al ser cuestionado de por qué irá hasta el viernes a ese municipio.
“No va a ser Reforma quien me dicte la agenda, quien me ponga la agenda”, insistió.
“Yo no tengo ningún problema de conciencia, yo estoy trabajando todo los días para garantizar la paz y tranquilidad en el país. Entiendo la desesperación de los conservadores, que no les gusta, les molesta mucho lo que hacemos, les preocupa porque ya no pueden saquear, no pueden robar”, sostuvo.
Recalcó que el próximo viernes visitará Minatitlán:
“La gente en Minatitlán sabe que estamos haciendo todo los que nos corresponde para garantizar la paz, no sólo en Minatitlán sino en todo el país. Deseo con toda mi alma que nadie pierda la vida, destrozaron al país estos corruptos”, insistió.
“Ese periódico si sigue así va a terminar como un pasquín, ojalá y rectifiquen”, consideró.
EL ABC DE LA POLÍTICA DE SU GOBIERNO:
El Presidente López Obrador dio a conocer esta mañana el ABC de la política del Gobierno que encabeza y con la cuál buscan reducir los niveles de violencia en el país:
«Para entendernos bien, como el ABC de nuestra política: primero acabar con la corrupción, primero, porque ése es el principal problema del país. Por la corrupción hay pobreza, hay inseguridad, hay violencia. Primero la corrupción», dijo.
«Segundo: la justicia. Ni la corrupción ni la justicia les importaban a los anteriores gobiernos, se dedicaban a saquear y no atendían las necesidades del pueblo. Tercero: la paz y la tranquilidad. El ABC: no a la corrupción, sí a la justicia, sí a la paz y tranquilidad. Pero la paz y la tranquilidad son resultado de la justicia», añadió.
Recalcó que la inseguridad no se resolverá en el país con el uso de la fuerza.
“Había una especie de enajenación pensando que la violencia se podía resolver con la violencia”, insistió.