La serie, que constará únicamente de ocho episodios y para la que Hirst ya planea fríos escenarios en Polonia, Finlandia, Canadá y quizás también Rusia, seguirá los pasos de los protagonistas también cuando ambos se separan.
Por María D. Valderrama
Cannes, 8 abril (EFE).- La novela más mítica de Borís Pasternak, Doctor Zhivago, que en el cine protagonizaron Omar Sharif y Julie Christie, volverá a las pantallas en una súperproducción de ocho episodios que prepara el creador de Vikingos y Los Tudor, el británico Michael Hirst.
Aunque no hay nombres, el guionista explicó en una entrevista a EFE que tiene en mente el fichaje de actores de peso para poder hacer frente al trabajo y a la huella que dejaron Sharif y Christie.
Hirst (1952), un referente en las adaptaciones de época que también llevó al cine en 1998 Elizabeth, con la actriz Cate Blanchett, ha escrito de momento el primer episodio y la llamada «biblia» del proyecto, pero espera poder empezar a rodar en noviembre.
La miniserie se encuentra en fase de preproducción pero ha atraído a numerosos productores que se reúnen con Hirst estos días en el mercado MIPTV de Cannes (sureste de Francia) y con su distribuidora internacional, Wild Bunch.
«Como la mayoría de cosas que hago, esperé a que alguien me lo sugiriera y ahí me decidí. Beryl Vertue, productora de Sherlock y yo nos hemos reunido una vez al año durante muchos años con la intención de hacer una gran historia de amor que nunca encontramos», declaró Hirst.
Hace dos años, Vertue dijo las palabras mágicas: «Puedo conseguir los derechos de Doctor Zhivago, ¿quieres hacerla?».
Hirst esperó a leer la novela para dar un sí definitivo y descubrió en ella el «relato más auténtico de lo que supone para el ser humano atravesar revoluciones» o situaciones que derivan en «catástrofes titánicas».
«La historia de amor de Doctor Zhivago ocupa solo 64 páginas de las 600 que tiene el libro, pero es una historia de amor poco convencional que satura todo el libro, un amor destinado al fracaso», opinó.
El británico dio algunas pistas acerca de qué rumbo tomará esta nueva visión de la obra maestra del Nobel de Literatura ruso, que no se publicó en la Unión Soviética hasta 1988.
Lara, el papel que interpretó Christie en la película de David Lean, será más fiel al personaje que retrató Pasternak.
«En la película ella es representada como una víctima y en el libro no lo es. Es muy fuerte e independiente. Está casada con otra persona, quiere ser profesora, quiere en cierto modo escapar a su destino», agregó.
La serie, que constará únicamente de ocho episodios y para la que Hirst ya planea fríos escenarios en Polonia, Finlandia, Canadá y quizás también Rusia, seguirá los pasos de los protagonistas también cuando ambos se separan.
«Cuando se conocen, ambos saben que están destinados a estar juntos, pero coinciden en un mal momento y en un mal lugar y, aunque se siguen encontrando una y otra vez y es amor verdadero, la naturaleza de las circunstancias les supera», consideró.
Hirst confesó que lloró mientras escribía el primer guión por la dureza del relato y que ve en la obra rusa la narración de un amor condenado, como lo sería hoy el de unos amantes en Siria u otros países marcados por la tragedia.
«Mucha gente ahora no sabe nada de la Revolución Rusa, pero no necesitas saberlo. Si ves Vikingos no tienes que saber mucho sobre vikingos, lo que te preocupan son los personajes. Mi trabajo como guionista es hacer que la audiencia ame a estos personajes y, si lo haces, lo que te importa no es que ganen los rojos o los blancos, sino sus experiencias».