Del más de medio millón de empleos perdidos en abril, fueron «fundamentalmente» los de menor salario, afirmó Zoé Robledo, titular del IMSS. «Nos preocupa, ese es un elemento que quizá pegue al elemento de pobreza», advirtió. El funcionario esperó que el plan para regresar a la «nueva normalidad» ayude.
Ayer, el IMSS informó que en abril se perdieron 555 mil 247 empleos formales como consecuencia de los efectos derivados de la emergencia sanitaria por la COVID-19.
Por Carlos Álvarez
Tijuana, 13 de mayo (Zeta).- Los 555 mil 247 empleos perdidos durante el pasado mes de abril correspondieron a trabajadores con salarios más bajos, lo que podría influir en el rubro de pobreza, según lo advirtió este miércoles Zoé Robledo Aburto, titular del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
«Se perdieron los [trabajos] de salarios más bajos, esto es lo que nos preocupa aún más, porque un trabajador que ya lleva más tiempo, que gana más, que el empleador le dio capacitaciones, es un elemento fundamental de su actividad económica», indicó el funcionario federal, entrevistado por medios nacionales.
«Estas no son las personas que están perdiendo el empleo, no así los que tienen un salario menor o menos tiempo [en el empleo], a veces son los más jóvenes», dijo Robledo Aburto tras asistir a la conferencia de prensa matutina presidencial, llevada a cabo en Palacio Nacional.
«Los empleos que se perdieron durante abril fueron fundamentalmente los de menores salarios, eso es también es lo que nos preocupa, ese es un elemento que quizá pegue al elemento de pobreza», advirtió el titular del IMSS, quien expuso, además, que con el nuevo plan federal para regresar a «La Nueva Normalidad», la reactivación de rubros como la construcción será factor para recuperar empleos en las obras.
«Es posible que estos empleos se pueden reactivar con el inicio de la construcción, por el tema de las obras. Creemos que esto va a ayudar muchísimo y cuando se abra la parte de servicios también, se ha hablado del tema de las industrias vinculadas con el transporte, de las automotrices, la aeroindustrial, esas también estamos seguros van a recuperar empleos, son plantas grandes que quizá en este momento tuvieron que dar de baja sus plantillas, pero que en buena parte se van a reactivar», agregó.
Robledo Aburto insistió en que durante el mes de marzo el empleo iba al alza y que tras el inicio de la crisis sanitaria, dicho rubro descendió hasta alcanzar los 700 mil empleos perdidos en un bimestre. Asimismo, el funcionario federal reiteró que a partir del 19 de mayo diversos sectores económicos podrán reactivarse pero con medidas de seguridad e higiene necesarias.
«En los lugares en donde el semáforo está en alguno de los colores que permita trabajar se empiezan a preparar, sobre todo en centros de trabajo que tienen mucha afluencia de personas, de personas que trabajan ahí, es decir una maquiladora, una planta industrial, los protocolos que tienen que seguir y por eso lo estamos dando este tipo de preparación», indicó el titular del IMSS.
«Tendrán que utilizar barreras físicas, organización de cómo tiene que ser el flujo de personal y otras que son de carácter administrativo, horarios de quiénes van a trabajar y a qué horas, uso adecuado de protección personal, sanitización, higiene, sana distancia», detalló el funcionario federal.
«Estoy hablando de empresas grandes que tienen arriba de 200 trabajadores que no necesariamente van a estar de manera simultánea, es la nueva normalidad, la idea que se debe de transmitir, es que no se debe de pensar que la reapertura es regresar a como estábamos antes», recalcó Robledo Aburto.
Ayer, el IMSS informó que como consecuencia de los efectos derivados de la emergencia sanitaria por el coronavirus SARS-CoV-2 (COVID-19), en abril pasado se perdieron 555 mil 247 empleos formales en México, lo que representó una disminución de -2.7 por ciento respecto a marzo de 2020.
En total se perdieron 189 mil 439 empleos permanentes y 365 mil 814 eventuales, la mayor cantidad de la que se tenga registro para un mismo mes de abril desde 2010. Mientras que de enero a abril de 2020, se perdieron 493 mil 746 empleo registrados en el IMSS, también la mayor cantidad en una década.
Del número de puestos de trabajo perdido, 161 mil 752 correspondían a empleos permanentes y 331 mil 994 a eventuales. Por estado, se observa que durante el cuarto mes del año, Quintana Roo tuvo un decrecimiento anual de -18.1 por ciento; seguido de Baja California Sur -10.8 por ciento; Guerrero -6.3; Nayarit -4.3; y Coahuila 3.9 por ciento.
En contraste, seis entidades del país reportaron un incremento en abril. Tabasco (2.3 por ciento), Campeche (1.7), Michoacán (1.7) Colima (1.6), Chiapas (1.2) y Aguascalientes (0.4). Por sectores, la construcción es la actividad de la economía que registra más empleo perdido, con -15.0 por ciento; seguida de la extractiva, con -5.5; los servicios para empresas -4.2; la transformación -2.6 y la eléctrica -0.6 por ciento.
Por el contrario, en el mismo mes, el sector agropecuario tuvo un crecimiento de 3.1 por ciento, los servicios sociales y comunales, de 2.5; los transportes y comunicaciones, 2.5; y el comercio de 0.9 por ciento. En cuanto al número de patrones afiliados, el Seguro Social reportó también un descenso en abril, ya que cerraron 6 mil 689 empresas respecto al mes previo.
Pese a la pérdida de patrones mensual, el IMSS tiene registrados un millón 1 mil 062 patrones en el IMSS, cifra que representó un incremento anual de 1.5 por ciento. Además, indicó que al 30 de abril el salario base de cotización de trabajadores asegurados alcanzó un monto de 403.6 pesos; lo cual representa «un incremento anual nominal de 0.8 por ciento, que es el más alto registrado para un mes de abril en los últimos diez años y, desde enero de 2019, el salario base de cotización registra crecimientos anuales nominales superiores al 6.0 por ciento».