El famoso actor británico ha sacado recientemente una película, La torre oscura, donde se pretendió hacer un homenaje a Stephen King, pero tuvo las peores críticas. Sin embargo, él sigue su carrera más allá del agente 007 y siendo el hombre con más estilo de Gran Bretaña.
Ciudad de México, 19 de agosto (SinEmbargo).- Cada vez que aparece la posibilidad de que James Bond sea negro, aparece él, que aunque no es una súper estrella, es sin duda el actor con más estilo de Gran Bretaña.
Idris Elba tiene 45 años, una novia –bueno, un poco envidiada, hay que decirlo- llamada Sabrina Dhowre (29), dos hijos, dos divorcios y una reciente película con Kate Winslet (42), que parece ser una fantasía femenina: te pierdes en un lugar lleno de nieve, precisamente con él, un perro y te salvas –hasta el perro mismísimo- y de pronto el amor va más allá de ese paisaje perdido en el planeta.
En dicha película, The mountain between us (con dirección de Hany Abu-Assad), Kate descubrió cuál era el fetiche sexual de Idris y lo contó en el programa de Graham Norton. En la escena de sexo, el actor le pidió a la actriz que se dejara los calcetines puestos. Al principio ella pensó que porque sus pies “son horribles”, pero en realidad «es justo lo contrario, señoras y señores. A Idris le encantan los pies», dijo su compañera.
En estos días, el tema de James Bond ha vuelto a protagonizar casi todas las noticias de espectáculos del mundo y otra vez Elba a estar en la boca de todos, incluso de aquellos que no ven nada bueno que el agente 007 sea negro.
“Mi nombre es Elba, Idris Elba”, escribió el domingo en su cuenta de Twitter y los rumores empezaron a crecer, mientras Daniel Craig (50) se prepara para filmar la película número 25 del personaje creado por Ian Fleming (1908-1964), a las órdenes de Danny Boyle.
Hace dos años, cuando comenzó a sonar otra vez su nombre para James Bond, Idris Elba le dijo al programa Good Morning America: “Sigo diciendo que si sucediera, sería la voluntad de una Nación, porque no ha habido ninguna conversación entre mí y el estudio sobre nada de eso”.
“Corriendo en autos y damas y martinis, ¿quién quiere hacer eso? Suena terrible”, afirmó.
Este hombre que ha hecho de villano en Star Trek (Krall), es también un DJ internacional (su nombre artístico es DJ Big Driis) a quien el agente 007 no le hace perder la tranquilidad ni sus privilegios. Es tímido, mide 1,90 metros (hasta a Madonna le ha puesto los ojos encima) y todos lo recordamos por ese detective torturado Luther, en donde demostró que además de sus dotes físicas es un gran actor.
“Me encanta ser Dj porque toda la actuación es en directo y puedes ver la reacción de la gente”, ha dicho a un periodista del periódico ABC en una noche de Ibiza.
“Siempre he sido una persona muy humilde, por mis raíces y porque mi familia así me lo enseñó. Soy muy afortunado de tener una vida llena de privilegios, pero no me siento superior a nadie. La industria del cine necesita definitivamente cambiar y mostrar más diversidad”, afirmó.
Recientemente, Netflix estrenó un documental dedicado a él, Cut from a different cloth, una crónica exclusiva donde el actor revela la colaboración con los fundadores del imperio de la moda Superdry, para el lanzamiento de una colección que lleva su nombre. Aunque su sitio está en la actuación: en los últimos tres años participó en 13 películas y dos miniseries.
El narcotraficante en The Wire (hizo de Stringer Bell), ha hecho de Mandela y fue la portada de Maxim, el único hombre en una revista donde siempre aparecen mujeres.
“Nunca en la historia de Maxim US un hombre había tenido una portada en solitario. Esta es la primera vez y no había más nadie en el mundo tan bueno como Idris”, dijo la editora Kate Lanphear en 2015.
Así las cosas, ¿alguien necesita que sea 007?