Por la mañana, el reportero fue valorado médicamente por el director del hospital de Chilapa, Luis Gutiérrez Almeida, así como por un traumatólogo, quienes no descartaron una fractura de mandíbula por los golpes, por lo que este jueves tendrá que practicarse un estudio integral para descartar una posible lesión de esa naturaleza.
Por Zacarías Cervantes
Chilpancingo, Guerrero/Ciudad de México, 31 de mayo (El Sur).- El reportero de El Sur en Chilapa, Luis Daniel Nava, fue privado de su libertad por aproximadamente media hora, golpeado, robado y amenazado de muerte la medianoche del martes en el centro de esa cabecera municipal, por dos jóvenes que posteriormente lo liberaron en la periferia de la ciudad, cerca de la Unidad Deportiva.
El reportero se encontraba con un amigo aproximadamente a la media noche en la cafetería La Chilagua, ubicada en el centro de la ciudad, pero salió a hablar por teléfono. Cuando terminó su llamada y todavía se encontraba sentado en la banqueta con el celular en la mano llegaron hasta él dos jóvenes de entre 18 a 22 años, aproximadamente, quienes le preguntaron que con quién hablaba y qué hacía en ese lugar.
Antes de que Luis Daniel les contestara uno de ellos le arrebató su teléfono y le exigió su contraseña. Después le preguntaron si llevaba vehículo y cuando les mostró su motocicleta que se encontraba estacionada como a cinco metros le exigieron la llave.
La calle a esa hora ya estaba desértica y cuando caminaban con él rumbo a la motocicleta uno de ellos comenzó a golpearlo en la cara, mientras que el otro amenazó que se lo iban a llevar “a tirar”.
No vio si los tipos llevaban armas, pero contó que uno de ellos tenía un maletín negro y que contantemente amenazaba con sacar algo de él, cuando le decían que se lo iban a llevar “a tirar”.
Ya en la motocicleta a él lo subieron en medio y así se mantuvieron dando vueltas por aproximadamente media hora.
Recordó que cuando pasaban cerca de la Unidad Deportiva, finalmente le pidieron que se identificara y les mostró su credencial de elector misma que revisaron y tomaron sus datos. Enseguida uno de ellos ordenó al otro: “Suéltalo y dale su moto”.
Pero agregó que cuando los tipos habían avanzado algunos metros, regresaron y lo volvieron a subir a la motocicleta y dieron algunas vueltas más cerca de la Unidad Deportiva, ubicada al poniente de la cabecera municipal y cuando finalmente se detuvieron le dijeron que lo iban a matar y volvieron a golpearlo en la cara. “En algún momento pensé que uno de ellos iba a sacar una navaja”, dijo, porque vio que se metía la mano a la bolsa, pero solamente lo siguieron golpeando hasta dejarlo tirado.
Cuando los agresores se retiraban con su moto y su teléfono, uno de ellos le advirtió que no dijera nada de lo sucedido, “porque ya te hemos visto en la calle”.
Cuando se retiraron Luis Daniel se dirigió hacia su casa caminando.
Por la mañana, el reportero fue valorado médicamente por el director del hospital de Chilapa, Luis Gutiérrez Almeida, así como por un traumatólogo, quienes no descartaron una fractura de mandíbula por los golpes, por lo que este jueves tendrá que practicarse un estudio integral para descartar una posible lesión de esa naturaleza.
El reportero de El Sur presenta golpes en varias partes del cuerpo, pero principalmente en la cara.
Los doctores fueron enviados por la Secretaría de Salud por instrucciones de la directora de la Unidad Estatal para la Protección de Personas defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, María Elena Jaimes Martínez, a solicitud del Presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (Codehum), Ramón Navarrete Magdaleno.
Después del mediodía, Luis Daniel Nava recibió la visita en su casa, de un grupo de reporteros de la APEG, quienes le expresaron su solidaridad. El periodista también recibió el apoyo de agremiados a la delegación 17 del Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP).
Por la noche en una carta pública la APEG, de la que es integrante Luis Daniel, repudió la agresión al reportero,
“La Asociación de Periodistas del Estado de Guerrero repudia la agresión contra nuestro compañero, ocurrida en este municipio donde se han empleado los operativos policiacos y militares más grandes del país, pero es considerado uno de los más inseguros del estado por la estadística de asesinatos, desaparición forzada y otros hechos violentos. El caso de Luis Daniel Nava lo demuestra”, dice el escrito.
“La APEG exige a las autoridades aclarecer esta agresión contra el periodista, sin descartar ninguna línea de investigación, incluida, por supuesto, su labor periodística”, demandó la agrupación.
La APEG exigió, asimismo, a los gobierno estatal y federal que garanticen el libre ejercicio periodístico, e hizo un llamado a las organizaciones estatales, nacionales e internacionales a que estén atentas al desarrollo del caso para que la agresión no quede impune.