El pasado 17 de mayo, el cuerpo de Aldo fue hallado sin vida al interior de un motel. En primera instancia se hablaba de un supuesto secuestro que habría terminado con la muerte del también estudiante de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
Hoy, el representante de Hoteles y Moteles en Puebla, Gustavo Ponce de León, dio a conocer que aparentemente el joven ingresó sin haber sido amenazado y por su propio pie al motel.
Por Edmundo Velázquez
Puebla/Ciudad de México, 22 de mayo, (Central/SinEmbargo).- Gustavo Ponce de León, representante de Hoteles y Moteles en Puebla, dijo que los acompañantes de Aldo Islas, el estudiante de la BUAP encontrado muerto dentro de una habitación del motel Miño, fueron identificados en los videos de seguridad del local. En estos se puede ver que el joven ingresó sin haber sido amenazado y por su propio pie.
Los jóvenes ingresaron en dos grupos: uno a la habitación 114 y el otro a la 115. En total trataba de 4 hombres y dos mujeres.
«Pidieron dos habitaciones, en una tres cuates, y en otros tres cuates, pasó el tiempo y salen. Pidieron dos habitación, tres y tres, y eso sí se permite, cuatro no se permiten ni se les permiten ingresar drogados o borrachos», señaló en entrevista Ponce de León.
La versión original planteaba que el joven había sido víctima de secuestro y que la Fiscalía General del Estado (FGE) había iniciado con la negociación por 2 millones de pesos que solicitaban los captores.
Sin embargo, los videos a los que Ponce de León hizo referencia indicarían otra variable o hipótesis, incluida la del auto secuestro.
«Es imposible grabar en la habitación, si escuchamos que una persona está gritando, y si su pareja sale y deja a la otra persona, inmediatamente se inspecciona. Hay un protocolo y muy estricto. No es cierto que lo levantaban y eran varios jóvenes de su edad, yo traigo la foto de cómo está. La investigación fue muchas horas, más de seis”.
Los jóvenes habrían llegado en un automóvil tipo taxi al inmueble ubicado en la 8 oriente 2604, a bordo de un taxi.
Después, los jóvenes huyeron y dejaron en la habitación 115 el cuerpo de Aldo, quien murió por asfixia mecánica o estrangulamiento.
Hasta el momento la Fiscalía General del estado no ha reportado ninguna versión oficial sobre los hechos.