El Segundo Debate Presidencial llega esta noche con un puntero que no ha bajado su ventaja de dos dígitos frente al segundo lugar y con un tercero estancado. El reto, dicen analistas políticos consultados por SinEmbargo, será ganar la intención del voto que dejó a la deriva Margarita Zavala Gómez del Campo con su salida de la contienda y definir el voto del electorado entre José Antonio Meade Kuribreña, candidato de la coalición “Todos por México” y Ricardo Anaya Cortés, abanderado de la alianza “Por México al Frente” para el último tramo del proceso electoral.
Para el analista José Antonio Crespo Mendoza el formato del Segundo Debate Presidencial es más moderno y se acerca al modelo que se utiliza en países desarrollados: “Es importante, le da más agilidad al debate, interés, permite la participación del público y no sólo de los conductores. Se parece más a los debates modernos de otros países”, dijo.
Ciudad de México, 20 de mayo (SinEmbargo).- El Segundo Debate Presidencial llega hoy con cuatro candidatos a la Presidencia de la República, un claro puntero que sigue con una diferencia de dos dígitos arriba respecto al segundo lugar, y un tercer lugar que se quedó rezagado. Los analistas consultados por SinEmbargo coinciden en que no moverá la tendencia de las encuestas, pero dejaron abierta la posibilidad a la sorpresa.
Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición “Juntos haremos historia” -de los partidos Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Partido del Trabajo (PT) y Partido Encuentro Social (PES)- tiene 46.1 por ciento de las preferencias electorales de acuerdo con el ponderado de Bloomberg, mientras que Ricardo Anaya Cortés, abanderado de la alianza “Por México al Frente”-entre el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Partido Acción Nacional (PAN) y Movimiento Ciudadano (MC)- cuenta con el 27.2 por ciento de la intención del voto.
La diferencia que separa al primer del segundo lugar es de 18.4 puntos, mientras que José Antonio Meade Kuribreña, candidato de la coalición “Todos por México” -entre el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y Partido Nueva Alianza (Panal)- tiene 19.2 por ciento de la intención del voto, es decir 26.9 por ciento abajo del puntero López Obrador.
El tema del debate será: “México en el mundo» y estará dividido en tres bloques: Comercio exterior e inversión, Seguridad fronteriza y combate al crimen transnacional, y Derechos de los migrantes. Se realizará en la Universidad Autónoma de Baja California y se transmitirá a las 21:30 horas de la Ciudad de México.
Tras el primer debate, el político tabasqueño se enfrascó un conflicto con parte de la cúpula empresarial, representada por el Consejo Mexicano de Negocios, que no mermó sus números en las preferencias; el ex Secretario de Hacienda hizo ajustes a su equipo encaminados a acercarse a las bases del PRI y a revivir a «los políticos» por encima de los tecnócratas, y el panista se enfocó en intentar mantener la imagen de ser el único con posibilidades de competirle al puntero, incluso sugirió ante empresarios la posibilidad de abrir un diálogo con el Presidente Enrique Peña Nieto, aunque horas después se desdijo.
Hoy son solo cuatro los aspirantes que participarán en el ejercicio ante la renuncia de Margarita Zavala Gómez del Campo, quien el miércoles pasado renunció a la carrera hacia Los Pinos en medio de una caída en las encuestas (su promedio de votos rondaba sólo el 3 por ciento). La ex Primera Dama no declinó en favor de nadie ni se ha pronunciado en favor de algún candidato. Meade y Anaya le hicieron un guiño, pero hasta el momento no ha abrazado a ninguno de ellos.
Ernesto Cordero Arroyo, Secretario de Hacienda con Felipe Calderón y cercano a su circulo, hoy se pronunció en favor de Meade.
El encuentro será moderado por los periodistas Yuriria Sierra Solorio y León Krauze Turrent. Habrá un nuevo formato en el que se permitirán preguntas de un grupo de 42 ciudadanos que presenciarán en vivo el debate y quienes, a partir de un sorteo, podrán hacer preguntas a los candidatos.
Cada uno de los aspirantes a la Presidencia de la República contestará al ciudadano sin ser interrumpido. Luego el moderador continuará con el tema.
El primer bloque, “Comercio exterior e inversión” será abierto por el independiente Jaime Rodríguez Calderon “El Bronco” en un primer segmento y cerrado por Ricardo Anaya. El segmento dos, la mesa de diálogo, lo abrirá José Antonio Meade Kuribreña.
Para el segundo será “Seguridad fronteriza y combate al crimen trasnacional” quien tomará primero la palabra será Andrés Manuel López Obrador y al final Ricardo Anaya. La mesa de diálogo la abrirá “El Bronco”.
Mientras que en la tercera parte “Derechos de los migrantes” será “El Bronco” quien lo abra y cierre. La mesa de diálogo la iniciará López Obrador.
Para el bloque final, con un minuto de tiempo para cada participante, el orden de participación será: Anaya, Meade, López Obrador y Rodríguez Calderón.
De acuerdo con el analista José Antonio Crespo Mendoza el formato del Segundo Debate Presidencial es más moderno y se acerca al modelo que se utiliza en países desarrollados.
“Es importante, le da más agilidad al debate, interés, permite la participación del público y no sólo de los conductores. Se parece más a los debates modernos de otros países”, dijo.
LA OPORTUNIDAD
Uno de los retos del Segundo Debate, dijeron analistas consultados por SinEmbargo, será ganar el pequeño porcentaje de votos que dejó Margarita Zavala Gómez del Campo con su salida.
“El debate estará circunscrito a tratar de ganar la simpatía de los electores que dejó huérfanos Margarita Zavala. La disputa entre el segundo y tercer lugar será clave, porque está a la expectativa un elector que decidirá seguir apoyando a Meade o buscar otras opciones encaminados a la última parte del proceso electoral”, dijo Salvador Mora Velázquez, politólogo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Otra las incógnitas será ver la estrategia que tome López Obrador frente a sus contrincantes, quienes durante el primer debate arremetieron contra él, sin que el ex Jefe de Gobierno tuviera respuestas contendientes a los cuestionamientos en el momento.
Para los analistas durante el primer debate López Obrador le dejó “todo el escenario” a Ricardo Anaya Cortés, quien se dedicó a cuestionarlo. Incluso, indicó Ivonne Acuña Murillo, investigadora del Departamento de Ciencias Sociales y Políticas de la Universidad Iberoamericana (UIA), al tabasqueño se le vio “distraído”.
“Se espera que López Obrador conserve su ventaja. Desde mi punto de vista no basta con que haga lo del primer debate. Estuvo mal asesorado, dicen que llevaba 13 láminas y usó tres, eso lo distrajo. Me parece que tiene que ser más él en este Segundo Debate, no es un gran debatiente en los términos de Anaya, pero sabe manejarse bien. Lo vimos en Milenio, él manejó la entrevista de Tercer Grado. Tiene cualidades, muchas que puede usar en el debate”, explicó.
Anaya buscará destacar, agregó la académica, y Lopez Obrador “no se debe confiar” y exceder en su estrategia de no caer en provocaciones.
“Esta parte está bien, pero en el caso del debate no debe dejar pasar tantas acusaciones. Él tiene que decidir cuál va a contestar y cuál no. No va a llevarse todo el tiempo contentando acusaciones, pero sí ser más protagónico porque tiene recursos, es un gran comunicador político”, dijo.
Sin embargo, aunque López Obrador haga lo mismo que durante el primer debate, su intención del voto no será mermada, consideró José Antonio Crespo Mendoza, investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE).
“Si hubiera una relación para él entre un mal desempeño del debate y los puntos, ya hubiera perdido puntos. Al electorado no le importa, van a votar por él y punto. Sepa o no sepa de los temas, ese electorado ya está con él”, dijo.
Pero el politólogo Salvador Mora consideró que hay una posibilidad de que el tabasqueño vaya tras el elector fluctuante y un voto de centro.