El candidato de “Juntos Haremos Historia” reiteró sus propuestas de vender el avión presidencial, convertir a Los Pinos en un centro cultural y retirar la pensión a ex Presidentes.
Ciudad de México, 20 de abril (SinEmbargo).- El candidato presidencial de la coalición “Juntos haremos Historia”, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que no está dispuesto a tolerar actos de corrupción de las personas más cercanas a él, y afirmó que aunque sean sus familiares, no permitirá este tipo de comportamientos.
«Puede ser una gente muy cercana a mí, puede ser incluso un familiar, pero si comete un acto de corrupción va a ser castigado; ¡nada de amiguismo ni de influyentismo ni de nepotismo!», declaró.
Durante un mitin en la delegación Milpa Alta, en la Ciudad de México, el tabasqueño reconoció que es posible que las personas se corrompan cuando llegan al poder; sin embargo, advirtió que no tolerará estos actos.
«Ya saben ustedes que el poder es una tentación, el poder atonta a los inteligentes y a los tontos los vuelve locos cuando no hay ideales», dijo.
El aspirante presidencial de la alianza entre el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el Partido del Trabajo (PT) y Encuentro Social (PES), reiteró sus propuestas de combate a la corrupción y de no incrementar los impuestos.
También insistió en convertir la residencia oficial de Los Pinos en un centro cultural, vender el avión presidencial y retirar las pensiones a los ex Presidentes.
Respecto a este último punto, López Obrador hizo referencia al comentario de su adversario José Antonio Meade para mantener las pensiones a los ex mandatarios.
«Un candidato llegó a decir que hay que darles la pensión para ser respetuosos con el estado de derecho. No se midió, pero no me voy a meter con eso», sostuvo.
El tabasqueño estuvo acompañado durante el evento por Claudia Sheinbaum, candidata a la Jefatura de Gobierno de la capital; Martí Batres y Citlalli Hernández, candidatos al Senado y los líderes del PES, Eric Flores, y el PT, Alberto Anaya, y el actor Carlos Bonavides.