Después de los avances militares y los acuerdos con las distintas facciones islamistas de la región, las fuerzas armadas sirias controlan el 94 por ciento de la zona.
Beirut, 6 de abril (EFE).- Las fuerzas armadas sirias iniciaron hoy el asalto a la ciudad de Duma, el último reducto rebelde de la región de Guta Oriental, en las afueras de Damasco, donde una treintena de personas murió por bombardeos, tras el fracaso de las negociaciones para pacificar la zona.
Las autoridades sirias y la facción Ejército del Islam, que controla Duma, se cruzaron acusaciones sobre la reanudación de las hostilidades, tras 10 días de calma relativa.
Según la televisión oficial, la Guardia Republicana, el cuerpo de élite de las tropas gubernamentales sirias, irrumpió en las granjas de Duma, en los alrededores de la localidad, después de que el Ejército del Islam obstruyera las conversaciones para hallar una salida a la situación y disparara cohetes contra Damasco y su extrarradio.
Sin embargo, el portavoz del Ejército del Islam, Hamza Birqadar, aseguró en Telegram que su grupo respondió a los ataques efectuados por las fuerzas gubernamentales y Rusia contra Duma, que fue golpeada con 50 bombardeos y 120 proyectiles de artillería.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó de que al menos 32 personas, entre ellas siete menores de edad, murieron y decenas resultaron heridas por supuestos ataques de la aviación de Rusia, aliada del Gobierno sirio, contra Duma.
Esta fuente subrayó que los aviones rusos llevaron a cabo más de 44 bombardeos contra la población.
Mientras, una lluvia de proyectiles impactaron contra distintas zonas de Damasco y su periferia, bajo el dominio de las tropas leales al Presidente sirio, Bachar al Asad.
Una fuente de la Jefatura de la Policía de la capital, citada por la televisión siria, indicó que al menos dos personas fallecieron y otras 20 resultaron heridas por el disparo de cohetes por parte del Ejército del Islam contra la ciudad y sus inmediaciones.
Las áreas atacadas fueron Masaken Barze, Al Rabue, Dahie al Asad, la plaza de los Omeyas y Meze 86.
El Observatorio confirmó la muerte de dos personas por la caída de los proyectiles y agregó que hubo 17 heridos.
La televisión oficial destacó que hay enfrentamientos entre las fuerzas armadas y el Ejército del Islam al sur de Duma y explicó que el objetivo del ataque de las autoridades es liberar a los secuestrados y prisioneros de esa facción.
Por su parte, el Ejército del Islam publicó en Telegram una fotografía de su líder, Esam Buidani, con Birqadar y otro dirigente del grupo observando un mapa de Duma, cuyos detalles aparecían difuminados para que no se apreciaran.
La instantánea fue difundida con un mensaje que precisaba que Buidani se había reunido con un responsable de las operaciones de su facción para revisar los planes para fortificar los frentes en Duma.
Se estima que puede haber entre 78 mil y 150 mil personas en esa urbe, de acuerdo a los últimos datos de la Oficina de Coordinación Humanitaria (OCHA) de la ONU en Siria.
Duma es el último reducto opositor que queda en Guta Oriental, donde el ejército sirio y sus aliados iniciaron una operación en febrero.
Después de los avances militares y los acuerdos con las distintas facciones islamistas de la región, las fuerzas armadas sirias controlan el 94 por ciento de la zona.
El domingo pasado, Rusia y el Ejército del Islam alcanzaron un pacto para la evacuación de los combatientes de esta organización y los civiles que lo desearan de Duma a las localidades de Al Bab y Yarablus, situadas en la provincia norteña de Alepo y en manos de rebeldes apoyados por Turquía.
De hecho, entre el lunes y el miércoles salieron tres tandas de evacuados de Duma en dirección a esas zonas, pero el proceso se suspendió ayer.
La televisión estatal acusó al Ejército del Islam de haber entorpecido las evacuaciones.
Por su parte, el Observatorio indicó que había una corriente dentro de esa facción que se oponía a la salida de los guerrilleros de Duma, ya que el acuerdo de evacuación en la práctica supone la rendición de este grupo.
Otro de los motivos del aplazamiento eran los impedimentos que estaba poniendo Turquía para el paso de los autobuses con evacuados de las áreas en poder de las autoridades sirias en Alepo a las que están en manos de los insurgentes a los que respalda.