Camilo Thompson, abogado del Programa de Biodiversidad Marina y Protección Costera de AIDA, explicó que el Gobierno de México ha incumplido con las obligaciones instauradas en la Convención Ramsar, especialmente en las que se refiere el uso racional de humedales, así como en la ejecución de las medidas necesarias para la protección de los humedales.
Las organizaciones ambientalistas se dieron a la tarea de ejemplificar con cuatro casos, las «prácticas insostenibles» de alteración de los humedales a causa de autorizaciones ilegales, falta de vigilancia y hasta por construcciones ilícitas que dan pie al cambio de uso de suelo y alteraciones al ambiente, con lo que se pasa por alto la Convención Ramsar.
ADEMÁS
Ciudad de México, 17 de febrero (SinEmbargo).- Organizaciones de la sociedad civil enviaron una «alerta urgente» a la Convención Ramsar, tratado intergubernamental para la protección de humedales, en la que urge a que realice una visita de especialistas al Parque Nacional Arrecife de Puerto Morelos (PNAPM) a fin de evaluar los riesgos que la zona enfrenta por el turismo masivo.
El 2 de febrero de 2004, el PNAPM, ubicado en el municipio de Puerto Morelos, en el estado de Quintana Roo, fue declarado sitio Ramsar. Es hogar de distintos ecosistemas, y, por tanto, de especies de flora y fauna que incluso se encuentran en alguna categoría de riesgo. A pesar de ello, el turismo amenaza con destruir todo a su paso.
Ante este panorama, la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA) —de la mano del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA), Voces Unidas, la Casa de la Cultura de Puerto Morelos, Flora y Fauna de México y el Centro de Innovación e Investigación para el Desarrollo Sustentable— presentó una alerta ante la Secretaría de la Convención Ramsar.
En entrevista para SinEmbargo, Camilo Thompson, abogado del Programa de Biodiversidad Marina y Protección Costera de AIDA, explicó que el Gobierno de México ha incumplido con las obligaciones instauradas en la Convención Ramsar, especialmente en las que se refiere el uso racional de humedales, así como en la ejecución de las medidas necesarias para la protección de los humedales.
Las organizaciones se dieron a la tarea de ejemplificar con cuatro casos, las «prácticas insostenibles» de alteración de los humedales a causa de autorizaciones ilegales, falta de vigilancia y hasta por construcciones ilícitas que dan pie al cambio de uso de suelo y alteraciones al ambiente, con lo que se pasa por alto la Convención Ramsar.
Sandra Moguel, directora regional de la oficina Sureste en Cemda, aclaró a este medio que los casos de Hotel Azul Sensatori, Hotel Azul Beach, Beach Club Petempich y Club de Playa del Hotel Playa Senator, incluidos en la carta dirigida a la Secretaría de la Comisión Ramsar, «no son los únicos»; no obstante, con ellos buscamos ilustrar «el sistema fallido».
«Lo que identificamos en estos proyectos es que tienen como hilo conductor una tala de mangle», criticó.
Por ello, Thompson manifestó que «no se han evaluado los daños que pueden ocasionar los proyectos turísticos en su conjunto. Hay una necesidad de evaluar cómo se están haciendo las cosas. Es necesario definir que ya no se deben de permitir este tipo de procesos que van degradando cada vez más el ambiente».
En el mismo sentido, Moguel, afirmó que «el arrecife de Puerto Morelos, según estudios, es uno de los arrecifes mejor conservados dentro del Sistema Arrecifal Mesoamericano y allí están operando [desarrollos turísticos] sin permiso. A veces es más barato construir, [los empresarios] piensan que es mejor pedir perdón que pedir permiso».
Los ecosistemas del PNAMP, subrayó Thompson, proveen de servicios ambientales, culturales y alimentos, en este último punto cabe mencionar que la pesca es la segunda actividad económica más importante de Puerto Morelos, el primer lugar está ocupado por el turismo.
Las organizaciones señalan que cada año medio millón de turistas visita el Parque. También indica que el número de habitantes se ha disparado durante los últimos años: En 1994 habitaban 80 pobladores y actualmente la cifra se encuentra por encima de los 29 mil, de acuerdo con el Plan Municipal de Desarrollo 2016-2018. La situación, alertan, es dañina para los ecosistemas.
Entre los bienes y servicios ambientales que proporcionan los humedales costeros del PNAPM destacan la protección frente a desastres naturales, como son huracanes y tormentas tropicales. También reduce la erosión de playas, fomenta la captación y purificación de agua.
Los servicios culturales que provee son la belleza paisajista que funciona como atractivo turístico; impulsa la recreación, buceo, esnorkel, pesca deportiva, navegación, educación e investigación, se lee en el documento realizado por las asociaciones ambientalistas.
«Hacemos un llamado urgente a la Convención Ramsar para que tomen cartas en el asunto, porque los ecosistemas están amenazados por la proliferación de infraestructura turística masiva», urgió Moguel.
«Buscamos que el número de turistas sea adecuado a la capacidad de carga de los ecosistemas de Puerto Morelos, que están amenazados particularmente por el desarrollo urbano que resulta del número de turistas que llegan, y de las viviendas que habita la gente que brinda atención a esos visitantes», añadió.
ADEMÁS
¿QUIÉNES HABITAN EN EL PNAMP?
De acuerdo con la Petición y Alerta Urgente a la Secretaría General de la Convención respecto al Sitio Ramsar número 1343, en la laguna del arrecife viven especies animales en peligro de extinción, entre ellas, las tortugas caguama, blanca y carey.
Además, hay especies amenazadas como el manatí del Caribe y otras más de protección especial, como son los corales cuerno de alce, cuerno de ciervo, abanico de mar, coral cilíndrico; caballitos de mar, de hocico largo y enano.
En lo que a especies de flora se refiere, las especies amenazadas que allí habitan son: mangle negro, rojo, blanco y botoncillo, además de palmas “KuKa”, “Nakax” y Chi’it (Thrinax radiata).
EMITEN RECOMENDACIONES PARA EL GOBIERNO
Ante lo expuesto, las organizaciones extendieron una serie de recomendaciones dirigidas a la Secretaría General de la Convención a que:
–Efectúe una visita de Misión Ramsar de Asesoramiento al PNAPM, a fin de apoyar a definir los límites del cambio de uso de suelo, la capacidad de carga y las necesidades para equilibrar, de forma más eficiente, el manejo de los humedales costeros tanto del PNAPM como de otros sitios Ramsar del litoral del Caribe Mexicano y los ecosistemas de humedales costeros en la región del norte de Quintana Roo del Sistema Arrecifal Mesoamericano.
–Exhorte al Estado mexicano a aplicar el enfoque precautorio por las amenazas y riesgos al Sitio Ramsar, y a realizar de forma adecuada las Evaluaciones de Impacto Ambiental y la Evaluación de Impacto Estratégica por la acumulación de impactos de los diversos proyectos turísticos.
–Inste al Estado Mexicano a cumplir con las obligaciones contenidas en la Convención y, debido a las necesidades de protección de la diversidad biológica y servicios ambientales que proporciona el Sito Ramsar 1343, actúe.
–Identifique y recomiende medidas para el fortalecimiento de la vigilancia, monitoreo, sanciones aplicables, compensación de daños efectuados a los humedales costeros, y acciones de restauración por los posibles impactos ocasionados por proyectos de desarrollo turístico, y se concreten instrumentos de ordenamiento territorial local para lograr la debida protección de los humedales costeros.
–Recomiende al Estado Mexicano enlistar en el Registro Montreux al Sitio Ramsar del PNAPM y proporcione asistencia a fin de ayudar a llevar a cabo una evaluación de impacto estratégica a fin de que la región se proteja y se conserve en su integralidad.
«Esperamos que se concrete la visita de los diplomáticos a Puerto Morelos. Es urgente tener recomendaciones por parte de expertos internacionales, de autoridades en humedales que puedan decir cómo apoyar a una industria sustentable desde el punto vista legal. Los proyectos se están aprobando de manera ilegal de uno en uno, sin tomar en cuenta el impacto acumulativo de todos ellos», expresó Moguel.