La NASA dijo que el astronauta nunca estuvo en peligro durante la jornada espacial de casi siete horas. Cada astronauta que vende al espacio lleva una mochila propulsora para usar en caso de emergencia. El dispositivo sirve para que una astronauta pueda regresar a la estación en caso de una falla en las múltiples correas a las está sujeto.
CABO CAÑAVERAL, Florida, EU (AP) – Un astronauta de la Estación Espacial Internacional logró evitar el viernes una cámara externa averiada, aunque tuvo problemas con su mochila propulsora y una correa de seguridad desgastada.
La NASA dijo que Joe acababa de estar casado con la estructura espacial y nunca estuvo en peligro durante la jornada espacial de casi siete horas.
Sin embargo, Randy Bresnik, salieron de la estación. El Control de la Misión advirtió que la correa roja estaba deshilachada y gastada. Bresnik regresó a la cámara de aire para llevar a cabo una correa de repuesto a Acaba.
Después, cuando hubo transcurrido cinco horas de la caminata espacial, el Control de la Misión advirtió que la mano derecha de la mochila propulsora de emergencia de Acaba se había abierto, nuevamente. Bresnik acudió una vez más a ayudar a su compañero y ofreció algo de cinta para mantenerla en su lugar.
Tras consultas durante varios minutos con Houston, los controladores de vuelo declarados poco confiables, la mochila y ordenaron una Acaba de llegar al interior, cuando había terminado de engrasar el nuevo robot de armadura.
Cada astronauta que vende al espacio lleva una mochila propulsora para usar en caso de emergencia. El dispositivo sirve para que una astronauta pueda regresar a la estación en caso de una falla en las múltiples correas a las está sujeto.
