Los jóvenes fueron hallados envueltos en una colcha y con bolsas de plástico en la cabeza en un terreno baldío, en la comunidad de Barrio Alegre en el municipio de La Perla, región montañosa de Veracruz.
Por Noé Zavaleta
Ciudad de México, 11 de agosto (SinEmbargo/Plumas Libres).- Los cuerpos sin vida de Asiel Dávila Rodríguez, de 23, y Félix Reyes González, de 22 años, fueron arrojados de una camioneta en movimiento a un terreno baldío, en la comunidad de Barrio Alegre en el municipio de La Perla, región montañosa de Veracruz.
Dávila Rodríguez y Reyes González, que habían sido reportados como desaparecidos días antes, hoy al medio día fueron identificados en la morgue, por sus familiares.
Ayer por la tarde-noche, ambos fueron aventados desde la carretera por sus victimarios.
Los jóvenes fueron hallados envueltos en una colcha y con bolsas de plástico en la cabeza; y en la necropsia de ley, cada uno presentaba una herida de bala en la cabeza, informaron empleados del Servicio Médico Forense de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Policías ministeriales que acordonaron el lugar de los hechos, también encontraron un mensaje de la delincuencia organizada escrito en una cartulina, el cual no dieron a conocer a reporteros.
En esa región, que abarca el corredor industrial Córdoba-Orizaba-Fortín de las Flores, hay un reacomodo de los grupos delictivos, que ha derivado en diversos “levantones”, secuestros y ejecuciones del crimen organizado, ante la pasividad de las corporaciones policíacas de los tres órdenes de gobierno.
Los jóvenes Dávila y González habían sido reportados como desaparecidos en el municipio de Nogales, pero sus cuerpos fueron tirados sobre el municipio de La Perla.
Desde el 20 de junio pasado, el gobernador Miguel Ángel Yunes declaró la guerra a los grupos delincuenciales que operan en Veracruz (Zetas, Antrax, Huachicoleros, Cártel de Jalisco Nueva Generación, Vieja Escuela de Los Zetas, Cártel de Sinaloa).
En 50 días ha habido cerca de cien ejecuciones a lo ancho y largo del estado, pese al reforzamiento de fuerzas federales en los llamados “puntos críticos”.