El lunes 3 de julio, el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera Espinosa anunció que el trazo del tren interurbano México-Toluca sería desviado en el bosque de El Ocotal, Delegación Cuajimalpa. Respecto a Cuajimalpa, Mancera Espinosa sostuvo en conferencia de prensa que cambiar el trazo del tren evitará dañar media hectárea de bosque y el derribo de más de tres mil árboles.
“No se afecta a El Ocotal. No se interviene; simple y sencillamente hay una modificación de procedimiento constructivo en este trazo. La diferencia es que en lugar de llevar un pilar al centro, como se está desarrollando en todo el trazo del tren, va a llevar dos que van a sostener esta estructura y eso va a permitir conservar el carril de circulación de la carretera”, dijo el Gobernante de la Ciudad.
Estaba en el antiguo Palacio del Ayuntamiento, acompañado por el delegado de Cuajimalpa, Miguel Ángel Salazar y el Diputado de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, Adrián Ruvalcaba Suárez, ex Gobernante de la demarcación.
A los comuneros de El Ocotal y a su abogado les resultó contradictorio que fuera justo el Diputado Adrián Rubalcava quien anunciara que el trazo del tren será desviado. Fue bajo su administración que se utilizó la triquiñuela de disfrazar a un funcionario de la delegación de comunero, con tal de despejarle el camino al tren interurbano –convertido ahora en la máxima obra del sexenio del Presidente Enrique Peña Nieto– en el pueblo de San Lorenzo Acopilco. Esta es la historia.
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Ciudad de México, 12 de julio (SinEmbargo).– Gabino Sandoval Baltasar es un hombre que tiene la capacidad del desdoblamiento. Sólo en 2015 tuvo tres personalidades. En las elecciones de junio dirigiría el operativo de hombres armados con palos que amenazaron a los votantes de la casilla 820, ubicada en la primaria General Santos Degollado. Ese mismo año sería también director ejecutivo de Recursos Naturales y Áreas Protegidas de la delegación Cuajimalpa. Y sería, al mismo tiempo, “representante” de los comuneros de San Lorenzo Acopilco.
De estas tres personalidades de Gabino Sandoval Baltasar, la de representante comunal resultó útil para cumplir el sueño empresarial del Grupo Atlacomulco, al que pertenece el Presidente Enrique Peña Nieto y el Gobernador electo del Estado de México, Alfredo del Mazo Maza: construir trenes de pasajeros.
Cuando apenas tenía 22 días en el Gobierno, el Presidente Enrique Peña Nieto exclamó: “Confío plenamente en que la alianza estratégica de los gobiernos con el sector privado fortalece y amplía la capacidad de realización de importantes obras de infraestructura para ayudar a nuestra competitividad para atraer mayores inversiones y, sobre todo, generar más empleos”.
Hablaba del México-Querétaro, el Transpeninsular en Yucatán y el Interurbano México-Toluca. El plan de austeridad de 2015 que retuvo 124.3 millones de pesos, sepultó en el olvido a los primeros; pero el interurbano sobrevivió. Dividido en tres fases, las licitaciones el Gobierno del Distrito Federal se iniciaron en 2014. Se trata de un trazo de 58 kilómetros a través de los municipios mexiquenses de Zinacantepec, Toluca, Metepec, Lerma, San Mateo Atenco y Ocoyoacac. Y ya en la jurisdicción de la Ciudad de México, en las delegaciones Cuajimalpa y Álvaro Obregón. En marzo de 2015 arrancó la tercera etapa. La que corresponde a los pueblos de Cuajimalpa y Álvaro Obregón.
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Cuajimalpa se extiende en los pueblos de San Lorenzo Acopilco, San Mateo Tlaltenango, San Pablo Chimalpa, El Contadero y el Parque del Desierto de los Leones. La demarcación representa 5.1 por ciento de la Ciudad de México y ahí habitan miles de comuneros al lado de cañadas, barrancas y una reserva de manantiales.
De acuerdo con la Ley Agraria, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) debía convocarlos a consulta si es que requería enajenar la tierra. En este punto apareció Gabino Sandoval Baltasar. Era funcionario en la delegación y se erigió comunero de San Lorenzo Acopilco.
El abogado de los comuneros, Édgar Isaac Salinas García, completa el relato: “Convocó a asamblea y pidió anuencia. Enseguida, se presentó ante la SCT. Cobró 47 millones 149 mil 500 pesos y después 14 millones 600 mil pesos. Los verdaderos comuneros no han visto hasta ahora un solo peso de ese dinero. Lo que sí se ve es al tren que está a punto de atravesar las tierras y los manantiales de Cruz Blanca”.
Así, el camino del tren fue despejado. Y las excavaciones en San Lorenzo Acopilco ya lograron secar la olla en la zona de Mina Vieja, la que captaba agua de los escurrimientos y se usaba para abastecer la parte alta de la comunidad.
Que Gabino Sandoval Baltasar era funcionario de la Delegación Cuajimalpa al mismo tiempo que actuó como representante comunal lo prueba la respuesta de la misma Delegación Cuajimalpa a una solicitud de información del 9 de julio de 2015, mediante el InfoDF. Se preguntó qué cargo ostentaba. La delegación respondió: “… ocupa actualmente el cargo de Director Ejecutivo de Recursos Naturales y Áreas Protegidas con un horario de tiempo completo de lunes a viernes. Asimismo hago de su conocimiento que el servidor público antes mencionado anteriormente tuvo a su cargo la Subdirección de Conservación Ecológica en el periodo comprendido del 16 de noviembre de 2012 al 31 de diciembre de 2014”.
Que recibió el dinero de la SCT como indemnización para los comuneros de San Lorenzo Acopilco ese mismo año consta en el cheque número 0000705 del banco HSBC, que según el abogado Édgar Isaac Salinas se le entregó el 28 de agosto de ese año ante la fe de Víctor Manuel Lechuga Gil, Notario Público número 15 del Estado de México.
Para el letrado, fue “un acto ilegal porque Gabino Baltasar no podía ostentar dos personalidades al mismo tiempo. En ese momento era funcionario público y representante comunal, aunque realmente no lo era”.
El abogado explica que Baltasar Sandoval fue representante comunero en 1989. En ese entonces, San Lorenzo Acopilco era una comunidad de hecho, no de derecho. Es decir, aún no era reconocida por la autoridad. En 1992, adquirió el reconocimiento. Así, 26 años después, esa personalidad fue revivida en el mismo Tribunal Agrario número 8.
Bajo el nombre de Gabino Baltasar Sandoval no hay ninguna cédula profesional en el Registro Nacional de Profesionistas. No se sabe qué grado académico alcanzó.
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La habilidad para el desdoblamiento de Gabino Sandoval Baltasar es similar al de el ex jefe delegacional y hoy Diputado en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Rubalcava ha sido un hombre con muchas caras. Uno capaz de tomarse la foto, alegre, como un político popular que enarbola y defiende causas sociales. Otro, ligado a Los Claudios, el grupo de choque que en 2014 desbarató manifestaciones como la de los circenses ante la ALDF o de las elecciones de junio de 2015.
En junio de 2015, perredistas y priistas se enfrentaron por la propaganda desplegada en la vía pública de Cuajimalpa. La versión de Raúl Flores, presidente del PRD en la Ciudad de México, fue que una brigada de su partido fue atacada por un grupo de personas vinculadas al PRI, lo que dejó un saldo de 11 jóvenes hospitalizados y 12 vehículos dañados. Flores, en su cuenta de Twitter dejó asentado que los perredistas fueron agredidos “por un convoy que lideraba Adrián Rubalcava”.
“Los Claudios” llevan ese nombre porque son encabezados por Claudio y Héctor González. En su contra hay por lo menos 10 averiguaciones previas en la PGJ de la CdMX.
Vecinos de Cuajimalpa que prefieren el anonimato señalan que Gabino Sandoval Baltasar participó en el operativo que reventó en 2015 las votaciones en la casilla 820.
Por eso, al abogado Édgar Isaac Salinas García y a los comuneros les pareció una escena “ficticia” que precisamente el Diputado Adrián Rubalcava anunciara al lado de el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México que el trazo del tren interurbano había sido desviado de El Ocotal. Les pareció extraño que lo presentaran como un logro de ellos. El abogado aún se pregunta dónde está el dinero que la SCT le dio a Gabino Sandoval Baltasar para los comuneros de San Lorenzo Acopilco.