Autoridades del ISSSTE precisaron que fue exclusivamente el personal de seguridad, contratados por una empresa externa que presta sus servicios al Instituto, quien no permitió la entrada a la Clínica de la persona que requería atención, por lo que le ha pedido tomar todas las medidas necesarias para prestar sus servicios con el máximo respeto a los ciudadanos.
Ciudad de México, 6 de junio (SinEmbargo).- El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) reprobó el comportamiento de los elementos de seguridad que labora en la Clínica de Medicina Familiar Gustavo A. Madero, al no permitir el acceso a sus instalaciones por no ser derechohabiente a un hombre en silla de ruedas que sufría una crisis.
A través de un comunicado, autoridades del ISSSTE informaron que han iniciado una investigación sobre el caso, pero en indagatoria preliminar, se les dio a conocer que el día 20 de junio, se presentó en el exterior del inmueble un incidente que se corresponde con las imágenes que circulan en Internet.
La dependencia precisó que «fue exclusivamente el personal de seguridad, contratados por una empresa externa que presta sus servicios al Instituto, quien no permitió la entrada a la Clínica de la persona que requería atención.
«Una vez que el personal médico calificado tuvo conocimiento de los hechos, atendió al afectado asegurándose que sus signos vitales (frecuencia cardiaca, frecuencia respiratoria y presión arterial), no indicaban condiciones de urgencia, por lo que se solicitó una ambulancia del ERUM cuyos tripulantes continuaron con la atención respectiva».
La institución ha solicitado a la empresa contratada para prestar el servicio de seguridad en la clínica en la que sucedieron los hechos, que tome todas las medidas necesarias a fin de cumplir los términos y condiciones del contrato respectivo por el que se encuentra obligada a prestar sus servicios con el máximo respeto a los ciudadanos, así como tomar las medidas disciplinarias que estimen necesarias.
En el video difundido ayer en redes sociales se observa el momento en el que los guardias le cierran las puertas en la cara al hombre y a una mujer que lo acompañaba, argumentando que no podían atenderlos por no ser derechohabientes.
En la grabación se aprecia cómo el personal de seguridad de la clínica discute con una mujer quien les reclama por no permitir que el hombre, quien se encuentra tirado en el suelo justo frente a la puerta, acceda para recibir la atención médica necesaria.
Pese a la insistencias de las personas que se encontraban en el lugar los elementos de seguridad se negaron a otorgarles el acceso e inclusive se colocaron de espaldas para tratar de ignorar lo que ocurría.