El diario Mainichi titula «Con las lágrimas de (Homare) Sawa y el llanto de (Aya) Miyama, las Nadeshiko se aseguran su primera medalla», y recalca la resistencia del equipo ante «el bombardeo» al que las galas sometieron a la niponas, que lograron imponerse por 2-1 en la semifinal disputada ayer en el estadio de Wembley.

El rotativo considera los sollozos de la veterana Sawa, excapitana del equipo y elegida «FIFA World Player» del año pasado y mejor jugadora y máxima goleadora del Mundial de 2011, y de Miyama, que heredó de la primera el brazalete este año, una muestra de la entrega de todo el equipo, que aguantó «defendiendo en su campo».

Además, con el pitido final, asegura el diario, se terminó de plasmar la unión de todo el equipo, que al unísono «entró a la carrera en el terreno de juego» a celebrarlo entre lágrimas.

Los 60.000 espectadores que llenaron el estadio de Wembley, definido como «la tierra sagrada del fútbol», vivieron un partido «cargado de nervios, sobre todo a partir del minuto 75», cuando Francia recortó distancias y Bussaglia marró a once minutos del final un penalti que habría llevado el partido a la prórroga.

El periódico Yomiuri, el de mayor tirada en Japón, subraya que el equipo resistió «oleada tras oleada» los ataques de las francesas, que dispararon 27 veces por solo 4 de las «Nadeshiko», que obtuvieron los dos goles, obra de Ogimi y Sakaguchi, tras faltas sacadas por la capitana Aya Miyama.

Las «Nadeshiko», llamadas así por una flor rosada que se utiliza como uno de los arquetipos nipones de perfección y belleza femeninos, y Estados Unidos, que ganó ayer a Canadá, reeditarán el jueves 9 en Wembley la final del último Mundial, donde Japón alzó su primera Copa del Mundo tras ganar en los penaltis. EFE