Recientemente, el periódico independiente ruso Nóvaya Gazeta publicó un reportaje en el que denunció la persecución y asesinatos de homosexuales en Chechenia y la existencia de cárceles secretas en esa república rusa de mayoría musulmana en el Cáucaso Norte.
Moscú, 5 de mayo (EFE).- El Presidente de Rusia, Vladímir Putin, respaldó hoy la investigación de la defensora del pueblo rusa, Tatiana Moskalkova, sobre la presunta persecución de homosexuales en el Cáucaso, en particular en Chechenia.
«Hablaré con el fiscal general y con ministro del Interior para que le apoyen en el tema que usted plantea sobre la conocida información o rumores acerca de lo que ocurre en el Cáucaso Norte con las personas de orientación sexual no tradicional», dijo el jefe del Kremlin a Moskalkova, según medios locales.
La defensora del pueblo informó a Putin de que actualmente estudia casos de homosexuales que han denunciado violaciones de sus derechos.
«He cursado solicitudes a la fiscalía y a los órganos de instrucción. Y me gustaría pedirle, si es posible, que disponga la creación de un grupo de trabajo en el centro (del país), y no en el territorio de Chechenia, para recibir las denuncias, si las hay», dijo Moskalkova.
Agregó que las indagaciones se ven dificultadas por el carácter anónimo de las denuncias, y recalcó que la legislación rusa permite ofrecer protección, que incluye hasta el cambio de identidad, a testigos y víctimas de delitos.
Hace tres días, durante su visita a Rusia, la Canciller alemana, Angela Merkel, pidió a Putin que ejerciera su influencia para garantizar los derechos de las minorías sexuales.
Recientemente, el periódico independiente ruso Nóvaya Gazeta publicó un reportaje en el que denunció la persecución y asesinatos de homosexuales en Chechenia y la existencia de cárceles secretas en esa república rusa de mayoría musulmana en el Cáucaso Norte.
El líder de Chechenia, Ramzán Kadírov, calificó la publicación de «provocación» y «calumnias».
«No se puede detener o perseguir a quien simplemente no existe en la república. Si en Chechenia hubiera esa gente, los órganos de seguridad no tendrían que preocuparse de ellos, ya que sus propios familiares los enviarían a un lugar desde donde nunca regresarían», dijo Alví Karímov, portavoz del líder chechén.
La oposición rusa acusa a Kadírov de instaurar en Chechenia un «Estado policial» por medio de un ejército privado integrado por 30.000 hombres que se subordina sólo a su líder, y no al Gobierno federal.