La dura eliminación del Arsenal ante el Bayern traerá consecuencias, y no sólo por el resultado (global de 10-2 para los alemanes), sino porque ya con un 1-5 en el marcador, Alexis fue captado en el banquillo mientras se reía a carcajada limpia.
Ciudad de México, 8 de marzo (SinEmbargo/ASMéxico).– El Arsenal está atravesando uno de los momentos más difíciles de su época moderna. Con un modelo agotado, unos resultados discretos tanto en Inglaterra como en Europa y con una polémica interna diaria en las últimas semanas.
Aunque el protagonista en las dos últimas ha sido el mismo: Alexis Sánchez. Precisamente la estrella de este Arsenal está en el ojo del huracán tras su sorprendente suplencia la pasada semana ante el Liverpool. La prensa especuló con una supuesta bronca la plantilla tras un entrenamiento y que llegó a provocar un enfrentamiento entre el chileno y su técnico, Arséne Wenger. El preparador francés lo desmintió, aunque la semilla quedó sembrada.
La dura eliminación del Arsenal ante el Bayern traerá cola, y no sólo por el resultado (global de 10-2 para los alemanes), sino porque ya con un 1-5 en el marcador, la realización del encuentro «caz2′ al chileno en el banquillo a carcajada limpia con Petr Cech. Una imagen que podría provocar una oleada de críticas no sólo de su afición, sino de todo el país en general.
La salida de Wenger a final de temporada (o antes), parece una realidad, al igual que la del ex futbolista del Barcelona. Juventus, PSG o Atlético de Madrid ya han mostrado interés por el chileno en más de una ocasión y, tras este episodio, uno de estos tres clubes podría ser el nuevo destino de Alexis.