El PAN ante su dilema: más de lo mismo con FCH o viraje rumbo a la democracia

01/08/2012 - 12:00 am

Mientras que los diputados y senadores electos del PAN ya empiezan a circular los nombres de quienes fungirán como coordinadores de bancada, la pugna interna en el Partido Acción Nacional (PAN) aumenta día con día. Felipe Calderón Hinojosa vive los últimos meses de su administración, que ha estado marcada por la lucha contra el crimen organizado y que ha dejado más de 60 mil muertos, miles de desaparecidos, éxodo de mexicanos y violencia.

Ante los poco favorables resultados del pasado 1 de julio, donde los votantes le dieron la espalda a Acción Nacional, el partido se ha visto fracturado y mantiene un conflicto por la dirigencia nacional que deja ver un futuro poco claro para el PAN, órgano político que Manuel Gómez Morín fundara en 1939 bajo principios humanísticos y éticos.

Actualmente los miembros del PAN son testigos del conflicto entre calderonistas, maderistas y josefinistas en un ambiente de derrota. Pero se acerca el tiempo de mirar hacia delante y decidir qué pasará con la tercera fuerza política en México, el partido que se distinguiera por su democracia interna.

¿Será que los panistas le dirán adiós a Calderón o continuarán bajo su mandato, ahora incluso como posible dirigente nacional?

Para muchos se trató de un «fracaso anunciado» que sólo el propio PAN se negaba a aceptar, lo cierto es que el pasado proceso electoral dejó a ese ente político sumido en la polémica y las dudas sobre su futuro.

La noche del 1 de julio, en la sede nacional del PAN, la candidata presidencial Josefina Vázquez Mota reconoció que los resultados no le favorecían con tan sólo 25.47% de los votos. Hizo ese anuncio igual que como la dejó su partido: sola.

Dos días más tarde, Vázquez Mota anunció que encabezaría un movimiento con los ciudadanos que votaron a su favor, que son más de 12 millones y expresó que “esto no es el final, sino apenas el principio de un gran movimiento que voy a encabezar”, pero desde entonces su presencia ante los reflectores ha sido prácticamente nula.

El 5 de julio, aún con el sabor de haber perdido un tercer período presidencial del PAN, Felipe Calderón aseguró que ante la derrota sufrida por su partido «hay que refundar» la institución.

En entrevista con Ciro Gómez Leyva para Milenio, Calderón aseveró:

Yo afirmo y creo que hay que refundar al PAN, hay que reconstruirlo desde los cimientos hasta la cúpula, piedra por piedra. Eso implica una labor titánica que me parece que debemos emprender todos los que queremos, no sólo queremos al PAN, sino que sabemos que es una opción necesaria en la vida política de México. En sus ideas, en sus principios, en su historia, en su compromiso democrático, en lo que hizo por el país, el PAN fue, finalmente, no el único, pero sí un protagonista y un impulsor principalísimo en la vida democrática en México. Cambió la historia sin disparar un tiro, y eso no puede quedarse así, no vamos a dejarlo así.

Durante la charla, el periodista le preguntó si considera que el resultado de la elección era un castigo de los votantes al desempeño de su gobierno, a lo que el mandatario respondió:

De alguna manera, en lo que al gobierno toca, sí afirmo que la responsabilidad es compartida y que son muchos factores, y que uno de ellos es lo que la gente siente. Y la gente, para decirlo en pocas palabras, probablemente mucha gente no cumplió sus expectativas que tenía puestas en el gobierno y votó por otras opciones. ¿Fue ese el único factor? No lo fue. ¿Fue el determinante? No lo creo, pero, ¿fue un factor? Sí, sí lo fue. Y por qué no cumplió este gobierno esas expectativas para esos electores, para muchos otros sí. Puede ser por varias razones. Una es por falta de logros o por falta de resultados. Otra puede ser por una falta de capacidad para transmitir esos resultados, esos logros, o puede ser una mezcla de las dos cosas.

En respuesta, el 26 de julio, el presidente del PAN, Gustavo Madero Muñoz, expresó vía Twitter: “No es refundarse lo que necesita el PAN porque sus cimientos son los mejores”. Sin embargo, hizo un reconocimiento a la labor del presidente Felipe Calderón, a quien consideró un gran activo para Acción Nacional.

Por su parte, aún con el ambiente de tristeza por los resultados obtenidos en los comicios, los panistas arrancaron el activismo interno en dos principales frentes: los maderistas y los calderonistas, que no sólo disputarán coordinaciones, también la dirigencia nacional del PAN.

CALDERÓN INICIA OFENSIVA

Pese a que Felipe Calderón no sólo vio perder a su partido, sino también la oportunidad de convertirse en titular de la Procuraduría General de la República, como se lo había propuesto Vázquez Mota antes de culminar su campaña, parece que no busca un puesto en dicha dependencia y sí en su partido.

El 22 de julio, ni siquiera a un mes de las elecciones, el periódico Reforma reveló en un amplio reportaje que el presidente lanzó una ofensiva para quedarse con Acción Nacional.

“En días laborales, algunas veces en Los Pinos y otras aprovechando giras oficiales de trabajo, el primer mandatario se ha reunido con decenas de panistas para discutir las causas de la derrota y el rumbo que deberá tomar el partido”, señaló el diario, que también informó que la operación dio inicio el pasado 2 de julio.

“Continuó el martes 3, en una comida de casi cuatro horas con la ex candidata Josefina Vázquez Mota; los gobernadores panistas de Baja California, Baja California Sur, Guanajuato, Jalisco, Morelos y Sonora; los ex dirigentes Luis H. Álvarez, Luis Felipe Bravo Mena, Germán Martínez y César Nava; los líderes parlamentarios José González Morfín y Carlos Alberto Pérez Cuevas; el dirigente, Gustavo Madero; el ex coordinador de la campaña Roberto Gil; el ex precandidato Ernesto Cordero; el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré; además de Diego Fernández de Cevallos, Pancho Barrio, Alberto Cárdenas, Juan Manuel Oliva y Tarcisio Rodríguez”, detalló el diario capitalino.

Según Reforma, panistas que prefirieron guardar el anonimato dieron a conocer que el Presidente repartió culpas, regañó y advirtió que refundaría el partido con o sin ellos.

LA GRESCA INTERNA

A pocos días del virtual triunfo del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en los comicios del pasado 1 de julio, dio inicio la disputa por el control del partido.

Por un lado, quienes apoyan a Felipe Calderón dieron muestras de buscar conseguir los votos suficientes que les permitan destituir a Gustavo Madero, debilitar a sus simpatizantes y quedarse con las coordinaciones legislativas. Mientras que los maderistas, a su vez, intentan conservar su hegemonía.

Pero la pugna no es sólo por la dirigencia nacional, también por el control en el Congreso: Ernesto Cordero, allegado a Calderón suena fuerte para contender por el control de la bancada blanquiazul en el Senado, en tanto que Luis Alberto Villareal hace lo propio por el bando maderista en la Cámara de Diputados.

Los maderista dieron un duro revés a Calderón apenas el día de ayer, cuando el círculo cercano al dirigente nacional del PAN, así como a la secretaria general del partido, Cecilia Romero, acordaron aliarse para impedir la pretensión del presidente Felipe Calderón de adelantar la Asamblea Nacional en la que se definirá el rumbo del partido.

Por su parte, Calderón y sus simpatizantes buscan que el proceso de reflexión se desarrolle en el menor tiempo posible y que la Asamblea Nacional Extraordinaria se adelante y se realice antes de que acabe su mandato como presidente de México, en tanto que Madero Muñoz, quien se ha manifestado en contra de la “refundación”, busca que haya un proceso de reflexión más largo, con consultas estatales y una ruta definida que supere este año y así, la Asamblea Nacional se realice como estaba planeada originalmente, en mayo próximo.

Es así, que el día de ayer diversos medios como Excélsior y El Universal dieron cuenta de que la disputa entre los maderistas y calderonistas se centra en la aprobación de la Asamblea Nacional Extraordinaria para discutir la reforma de los estatutos del partido.

Ambos diarios han informado que tanto Madero como Calderón iniciaron una serie de encuentros con consejeros nacionales de todo el país, con el objetivo de sumar apoyo y es que los maderistas podrían tener ventaja, pues actualmente cuentan con más de la mitad de los 381 integrantes del Consejo Nacional, único órgano que puede destituir al líder panista.

El Consejo Nacional del PAN se celebrará el próximo 11 de agosto y en él se definirán las acciones a seguir ante los resultados electorales y los próximos 14 comicios, así como también se evalúen los métodos para seleccionar candidatos, es decir, el futuro del PAN, mismo que está en el aire.

LOS BENEFICIARIOS DEL CALDERONISMO

Pero no todos pierden con la salida del PAN de Los Pinos. Diversos personajes del blanquiazul estarán presentes en el próximo Congreso, se trata de el grupo más cercano al presidente Felipe Calderón.

Entre los actores políticos allegados al Jefe del Ejecutivo que ocuparán los escaños del PAN en el Senado se encuentran Ernesto Cordero, ex secretario de Hacienda y quien buscó la candidatura presidencial de su partido arremetiendo en su pre campaña en contra de Vázquez Mota por sus presuntas inasistencias en la Cámara de Diputados. Poco después, limaron asperezas.

Ernesto Cordero es uno de los nombres que suenan fuerte para coordinar a la bancada de su partido.

También Luisa María Calderón, hermana del presidente, será senadora. Fue candidata por su partido al Gobierno del Estado de Michoacán durante las elecciones de 2011, pero perdió ante el priísta Fausto Vallejo.

Roberto Gil Zuarth, ex coordinador de la campaña presidencial de Josefina Vázquez Mota, tampoco quedará fuera de la jugada política y llega a la Cámara Alta por la vía plurinominal.

Gil Zuarth ha ocupado diversos cargos durante el calderonismo, entre ellos el de diputado federal de representación proporcional en 2009, puesto que dejó para convertirse en el funcionario más joven al frente de la Subsecretaría de Gobierno de la Segob, aunque siete meses más tarde regresó a su curul. Además, fungió como Secretario Particular de la Presidencia durante casi un año.

Asimismo, Mariana Gómez del Campo, sobrina de la primera dama Margarita Zavala, y quien se desempeñara como diputada local y dirigente del PAN en el DF será otra de las representantes de Acción Nacional por la vía plurinominal. De hecho, se le ubicó en el segundo sitio de la lista nacional de su partido cuando éste definió candidaturas en febrero pasado.

Otros de los que representarán a los blanquiazules en la Cámara Alta son los ex colaboradores del Presidente: Salvador Vega Casillas, Secretario de la Función Pública, y el ex secretario de Educación, Alonso Lujambio, quien renunciara a su puesto el 16 de marzo de 2012 para tratarse un cáncer de médula ósea.

Mas la presencia de panistas cercanos a Calderón no sólo se hallará en el Senado, en la Cámara de Diputados Max Cortázar tendrá su curul.

Ex baterista de Timbiriche, con un currículum que no deja claro su grado de escolaridad y con cargos importantes a nivel federal como por ejemplo ex vocero presidencial, Cortázar ha resultado uno de los hombres más beneficiados los últimos seis años.

En la Cámara Baja, Cortázar estará acompañado por el diputado federal Guillermo Anaya, compadre de Calderón.

Aún se desconoce si Felipe Calderón lograra su objetivo de dirigir al partido que lo encumbró a la presidencia, pero por lo menos, se aseguró de que su cerrado círculo se mantuviera en el poder, aunque no con tanta fuerza.

Ana Leticia Hernández Julián
en Sinembargo al Aire

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