El videoclip fue trasmitido vía Periscope y grabado a las afueras de la Contraloría. En las imágenes Arne explica que fue citado debido a que no avisó en tiempo y forma de su cambio de puesto de Director General de Desarrollo Delegacional a Director General de Administración Delegacional en la misma delegación.
EN DIRECTO en #Periscope: Vine en mi calidad de «Presunto responsable» a comparecer a la @ContraloriaCDMX con la ge… https://t.co/9Oi0w55KoS
— Arne aus den Ruthen (@arnemx) 29 de agosto de 2016
Ciudad de México, 29 de agosto (SinEmbargo).- Arne aus den Ruthen publicó este lunes un video, momentos antes de ingresar a la Contraloría General de la Ciudad de México en calidad de «presunto responsable», por incumplimiento de «papeleo burocrático» en febrero del presente año cuando fungía como funcionario público de la delegación Miguel Hidalgo.
El videoclip fue trasmitido vía Periscope y grabado a las afueras de la Contraloría. En las imágenes Arne explica que fue citado debido a que no avisó en tiempo y forma de su cambio de puesto de Director General de Desarrollo Delegacional a Director General de Administración Delegacional en la misma delegación.
El ex funcionario acepto su responsabilidad y aseveró que no realizó este trámite en su momento debido a la restructuración delegacional, aún que posteriormente lo efectuara, aseguró que la Dependencia de Gobierno «se pone las pilas durísimo con trámites absolutamente ociosos y los asuntos realmente relevantes que tienen que ver con desfalcos patrimoniales, pues ahí si dormidos en sus laureles», aseguró el ex City Manager.
Durante la misma transmisión, Arne comentó que ya tenía antecedentes con la misma dependencia ya que pues en 2003, cuando era jefe delegacional de la Miguel Hidalgo no cumplió con el Manual de Identidad Gráfica de la Ciudad de México.
Esto debido a que el manual decía que todos los documentos oficiales que fuera emitidos por la delegación de tendrían que contener los colores del PRD, y la leyenda «mi corazón late a la izquierda», motivo por el cual en ese momento Ruthen los mando «a la chingada» provocando una amonestación y sanción por parte de la Contraloría.