Ese punto en la espalda que se llama solidaridad

18/06/2016 - 12:00 am
Los Protagonistas De nadie Sabe Nada Foto Eldiarioes
Los Protagonistas De nadie Sabe Nada Foto Eldiarioes

Los españoles Andreu Buenafuente y Berto Romero hacen todos los sábados un programa de radio singular por la Cadena Ser: Nadie sabe nada.

El procedimiento es sencillo y tiene resultados desopilantes: los oyentes mandan preguntas insólitas y al mejor estilo jazzístico, los conductores improvisan y dan sus opiniones, casi siempre hilarantes, algunas veces reflexivas y hondas.

En la emisión llevada a cabo el pasado 23 de abril, realizada en la calle con motivo de la fiesta de San Jordi, un oyente hizo una pregunta relacionada con ese punto de la espalda cuando nos pica y no nos podemos rascar.

¿Qué sentido tiene que pique si no nos podemos rascar?

La respuesta de Berto Romero fue genial, como ya es costumbre en el enorme cómico español: Ese punto se llama solidaridad.

A menudo solemos decir: “a mí nadie me regaló nada”, como la manifestación de un heroísmo existencial que no cuadra.

Muchos nos regalaron mucho siempre. Y nunca falta la picazón en la espalda que busca desesperadamente la mano rascadora del otro lado.

Y es cierto, nos pica la espalda para que la vida pueda demostrarnos que no podemos vivir solos, que necesitamos tarde o temprano a alguien que nos rasque la espalda, nos haga un té de manzanilla cuando estamos mal, nos preste una aspirina cuando nos duele la cabeza.

Si en algo hemos sido duchos en estos tiempos es en haber regado con agua clara la plantas de un acérrimo y arrogante individualismo. Nos jactamos de no pedir nada a nadie, de habernos hecho solos, de estar solos, de no necesitar de nadie, dicho esto último marcando bien las sílabas, apretando los dientes y mirando con furiosos ojos el horizonte cercano.

En este punto, recuerdo al filósofo, humorista y escritor argentino Alejandro Dolina, quien en su legendario programa de radio remedó un día un imaginario encuentro con un psicoanalista.

El profesional le pregunta: ¿Qué le pasa?, ¿Se siente solo?

Y él responde con voz firme: ¡No me siento solo, estoy solo!

Estamos solos muchas veces y la mayoría de ellas, efectivamente, porque así lo hemos decidido. Amamos nuestras rutinas, nuestras costumbres, no voy a negar que a veces la soledad es un arma poderosa contra el hastío y la constatación de una existencia transitada a pleno.

Pero nunca rechazaré una mano que me rasque la espalda cuando me pique. Así soy de gregaria. Y no me pesa.

Mónica Maristain
Es editora, periodista y escritora. Nació en Argentina y desde el 2000 reside en México. Ha escrito para distintos medios nacionales e internacionales, entre ellos la revista Playboy, de la que fue editora en jefe para Latinoamérica. Actualmente es editora de Cultura y Espectáculos en SinEmbargo.mx. Tiene 12 libros publicados.
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