Fabián Polanco
03/02/2015 - 12:00 am
La pasión verdadera por estar en el escenario
Uno de los grandes talentos que el Teatro Musical mexicano ha entregado es José Antonio López Tercero, quien con 21 años de amplia trayectoria ha logrado ser considerado como un Primer Actor en este campo, formando parte de proyectos de gran talla en su paso por nuestro país como “El fantasma de la ópera” y […]
Uno de los grandes talentos que el Teatro Musical mexicano ha entregado es José Antonio López Tercero, quien con 21 años de amplia trayectoria ha logrado ser considerado como un Primer Actor en este campo, formando parte de proyectos de gran talla en su paso por nuestro país como “El fantasma de la ópera” y “Los Miserables”, entre otros; además de demostrar su talento en suelo extranjero, como ocurrió con “¡Si nos dejan!”, musical mexicano que hizo temporada de más de un mes en Colombia.
Teniendo como padrino de trayectoria al mismísimo Manolo Fábregas, que lo incluyó después de verlo en su rol de cantante de ópera, en la comedia musical “Un tipo con suerte”, José Antonio hoy día se encuentra trabajando en uno de los musicales que más ha llamado la atención de nuevas generaciones, ahora en su segunda temporada: “Hoy no me puedo levantar”, producida por Alejandro Gou, al cual se integró para interpretar un personaje que tiene una actuación especial: “Venancio”, el dueño del Bar 33.
En la historia él es una pieza fundamental en el desarrollo de la trama. Recibe a Mario y a Colate, emigrantes del campo a la ciudad en busca del triunfo artístico, les da trabajo y termina siendo un apoyo y guía para ellos y el resto del grupo, como ya lo es para él María, la protagonista, actriz principiante que trabaja con él.
“Venancio”, el cual transforma a López Tercero en lo físico y artístico, representa a una persona de la generación anterior, que también tuvo sueños parecidos a los de los jóvenes, pero que encontró la estabilidad fuera del medio artístico, aunque dentro de la bohemia de los bares con música. Ex-integrante de ‘Los Piquis’, grupo juvenil que no prosperó, se identifica con los sueños de esos chicos pero conoce las dificultades que enfrentarán en un Madrid que despierta de 40 años de dictadura franquista, en el que el destrampe y la droga se llevan entre las patas a muchos chicos.
Conforme avanza la trama, nos damos cuenta que más allá de su apariencia ruda y ‘dark’, así como sus enojos y regaños, sólo son apariencia en alguien que representa una figura paternal para todos esos chicos, que, sin decirlo, lo manifiestan a lo largo de toda la historia.
Cabe mencionar que en esta puesta, “Hoy no me puedo levantar”, José Antonio López Tercero, es el personaje con mayor edad dentro de la historia, lo cual marca por así decirlo, una nueva etapa en su carrera, lo cual él acepta a la perfección pues son ya más de veinte años de trabajo arduo dentro del teatro musical.
Y aunque llegó a este género con una preparación previa, al entrar a las “ligas mayores”, por así decirlo, tuvo que empezar un nuevo camino de preparación en la actuación, el baile y el “aguante” que significa pasar fines de semana fuera de casa y, a veces, “sintiendo que es más lo que se sacrifica que lo se gana”, dicho por él.
Ser el mayor de una compañía juvenil conlleva para él una enorme responsabilidad, aunque cabe destacar que esta sensación la vive a diario al estar frente a sus alumnos de preparatoria y secundaria, pues es químico de profesión y autor de varios libros de texto avalados por la Secretaría de Educación Pública.
Lo que si representa un reto para él es incorporarse a una compañía teatral con un camino recorrido, además de tener un productor nuevo, Alejandro Gou quien lo ha recibido con toda la confianza que cuatro lustros han dejado consigo: la pasión verdadera por estar en el escenario y el ser un artista responsable que muestra cómo disfruta su trabajo sin que cansancio o enfermedad se noten.
No obstante, López Tercero no peca de egocéntrico, dejando en claro que no tiene nada que enseñar a las nuevas generaciones, más allá de ese gusto y alegría por hacer los personajes que se van apareciendo en su camino.
Al hablar acerca de la nueva generación de cantantes y actores de teatro musical, el artista considera que hoy día hay más posibilidades de preparación y de alcanzar el éxito, a diferencia de hace 20 años. Gracias a ello, ha podido percatarse que existen muchos chicos y chicas que cantan, bailan y actúan muy bien y que podrían estar destinados a ser los protagonistas del futuro cercano.
Pero, al igual que él y varios de sus compañeros, tendrán que enfrentar la competencia, la preparación continua y permanente, la resistencia al cansancio y el aguante para que la fama no los arrastre y los haga caer de ladrillos que, de pronto para muchos parecen torres.
López Tercero cree que las nuevas generaciones, no sólo de artistas, están influidas de una necesidad de prisa e inmediatez que no siempre son compatibles con el éxito y muchos no están dispuestos a trabajar al ritmo y con la intensidad necesaria.
ES UN HIJO DE LA LUNA
Volviendo a “Hoy no me puedo levantar”, José Antonio López Tercero se ha confesado un seguidor del grupo Mecano, al cual conoció antes de que sus discos aparecieran en México. Un amigo de la primaria viajó a España y trajo un cassette de ese grupo que empezaba, un poco con el morbo de escuchar letras y melodías que parecían banales y exóticas. Él era un niño muy cursi, y esos primeros discos no despertaron especialmente su interés.
Pero como a todos los de su generación, el bombardeo constante por todos los medios le fue calando y años después ya compraba sus discos y recopilaciones. Le llegaron a encantar canciones como “Hijo de la Luna”, “El año más” y “El 7 de septiembre” y hoy disfruta poder estar inmerso en esas melodías que, por lo que puede ver en la respuesta del público de todas las funciones, no sólo atrae a quienes fueron seguidores y hoy pasan de 40 años, sino que han atraído a jóvenes y chiquillos que hoy son fans, al menos de esta historia.
Si tuviera la posibilidad de participar en la realización de un musical con música de los artistas o grupos de los que era seguidor, eligió a Mocedades y Trigo Limpio, aunque aceptó que no funcionaría por ser demasiado meloso. De hecho, reconoció que hoy día se agotan las opciones en la realización de estas propuestas.
José Antonio fue uno de los protagonistas de “Bésame mucho”, musical con boleros, y en “¡Si nos dejan!”, con música ranchera; y aunque ahora los creadores cada vez se van más hacia atrás y a épocas remotas para hacer éxitos en Broadway, considera que esta vertiente podría poner en peligro la vigencia y aceptación de este género, aunque nunca se sabe.
Mientras esto sucede, a la par de este proyecto teatral, José Antonio López Tercer ultima los detalles del que será su manera de festejar 20 años de trabajo en el Teatro Musical: la grabación de un disco con los temas que ha considerado sus favoritos en su paso por este género teatral; material que será producido por él, dirigido por Bruno Bauche y grabado en Miami.
Algunos musicales en los que ha participado José Antonio López Tercero han sido” “Un tipo con suerte”, “La mujer del año”, “Loco por ti”, “Los Musicales”, “El fantasma de la ópera”, “El Full Monty: desempleados y desvestidos”, “Los Miserables”, “La calle 42”, “Bésame mucho”, “Víctor, Victoria”, “Una Eva y dos patanes”, “¡Si nos dejan!” y “Hoy no me puedo levantar”.
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